Néstor Kirchner volvió a cargar ayer contra la prensa que critica la gestión de gobierno, pero sobre todo contra la que en los últimos días comenzó a poner en duda la candidatura a gobernador bonaerense de Daniel Scioli. “Daniel es el candidato y el 10 de diciembre va a jurar como gobernador”, subrayó el Presidente, en un enfático respaldo a su vice.

El mandatario habló en Hurlingham, durante la inauguración de una planta de líquido cloacales de la que participaron los ministros de Planificación, Julio De Vido, y del Interior, Aníbal Fernández. El Presidente se sintió obligado a poner fin a las especulaciones sobre el futuro de Scioli que llegaron a los medios.

No sólo algunos analistas evaluaron últimamente la alternativa de que Cristina Kirchner pudiera desembarcar en la provincia. El ex ministro de Economía y candidato presidencial Roberto Lavagna también echó a rodar esa posibilidad.

“Decimos que (Scioli) va a ser el candidato y ya es el candidato a gobernador. Dicen ‘lo van a cambiar’ y con Daniel nos reímos. Es el candidato, va a jurar como gobernador el 10 de diciembre y estaremos todos felices”, afirmó Kirchner ante la sonrisa de Scioli, quien lo acompañó en el acto junto al mandatario provincial Felipe Solá.

El Presidente rechazó las críticas de parte de los medios que consideran electoralista la realización de obras de infraestructura y advirtió que “muchos sectores de la prensa deben hacer una autocrítica, porque muchos no resisten el archivo”. Esa misma crítica había efectuado el día anterior en la Casa Rosada, durante un acto en el que, al igual que ayer, cuestionó el papel de los periodistas.

“Sería muy interesante –señaló ayer el Presidente– que algún día los periodistas también tengan que responder sobre lo que dicen ante el pueblo argentino.” Y cuestionó la creencia de que “se es buen periodista si se habla mal, se agravia y se descalifica. ¿Por qué esta manía? Yo no sé si es porque vengo de un pueblo chico y del país federal, que a algunos los pone tan nerviosos. Han administrado el país durante años con un concepto totalmente centralista y fue totalmente doloroso y desastroso, ¿por qué no nos dejan trabajar?, ¿por qué no nos apoyan?”, redondeó.