“El que gana es Ibarra”, dice Néstor Kirchner, metido de lleno en la elección porteña. Según explican en la Rosada, las palabras del Presidente buscan dar fuerza a la candidatura de Daniel Filmus en fuerza. La esperanza del oficialismo es que el ex jefe de Gobierno y candidato a legislador le traccione los votos necesarios al ministro de Educación como para asegurarle un lugar en el ballottage.

No se trata aquí de un repentino enamoramiento con Ibarra sino de puro pragmatismo: Kirchner recibió el viernes los últimos sondeos de la ciudad y la intención de voto del ex jefe de Gobierno está en alza. Según la encuesta que se mire, esa cifra oscila entre el 20 y el 30 por ciento, muy por encima de la adhesión que recibe Ginés González García, cabeza de la otra lista de legisladores que apoya a la candidatura de Filmus. El dato obligó a un rediseño de la boleta oficial: el apellido de Ibarra aparecerá con una letra de molde más grande que el de Filmus. Eso revela, a menos de un mes de los comicios, que el jefe de la cartera educativa sigue registrando un alto nivel de desconocimiento entre el electorado. El giro de la estrategia oficial es significativo. Desde la próxima semana, Ibarra tendrá una mayor participación en la campaña. Ya compartió una sesión de fotografía con Filmus para una serie de afiches callejeros. “Lo que ayude para ganar la ciudad, bienvenido sea”, dijo el ex jefe a Página/12, quien no obstante, asegura que Filmus crece por sí solo y que hay encuestas que lo muestran por encima de Jorge Telerman.

Un dato para no pasar por alto: prácticamente ningún candidato cuestiona públicamente al destituido Ibarra. Aun con la tragedia de Cromañón fresca en la memoria, los asesores de imagen de su competencia consideran que ponerlo en el centro de escena consolidaría aún más su imagen positiva. Dicen que en el imaginario colectivo persiste la idea de que el ex jefe fue víctima de una conjura política.

En la Rosada dicen que Kirchner lo ve ganador aun ante una derrota de Filmus. Si Mauricio Macri se quedara con la ciudad, especulan, un buen resultado electoral del ex jefe de Gobierno lo convertiría raudo en el principal referente de la oposición porteña. Ningún sondeo discute hoy la supremacía de Macri. Y hasta resaltan su estrategia de ponerse al margen de los ataques que le dispensan la Casa Rosada y Telerman. Por eso su mal humor fue notable a la salida del programa “Tiene la Palabra”, que se emitió el viernes por el canal de cable TN.

La primera sorpresa provino desde el panel de invitados, cuando un periodista de este diario le expuso una foto (que se reproduce en estas páginas) en donde se lo ve junto a Juan Carlos Rousselot firmando un acuerdo para la construcción de cloacas en Morón. Por esa licitación, tildada de irregular, el intendente fue destituido de su cargo. El segundo mal trago fue al momento de la votación de la platea, un clásico del programa. El 61 por ciento consideró que no merece ser jefe de Gobierno porteño.

–Fui de buena onda y de repente me salieron con cosas que no tienen que ver con nada –refunfuñó Macri al hablar sobre su participación en la tele, según confió a Página/12 un hombre de su riñón.

Al día siguiente se conformó señalando que ese número no es homogéneo y reúne a los partidarios de todos sus competidores. Un razonamiento válido para la primera vuelta, pero no para el ballottage. De hecho, en las propias filas del PRO manejan encuestas que lo dan perdidoso ante un escenario de segunda vuelta con Telerman, no así con Filmus.

A socializar

Para apuntalar al ministro de Educación, la Casa Rosada daría a conocer un acuerdo con un sector del socialismo. En los hechos, dos referentes porteños de ese partido, como Raúl Puy y Mariana Alanis, son candidatos de la lista de Ibarra. Pero en las próximas horas se verán afiches donde el propio Héctor Polino se manifestará a favor de Filmus. Romperá así con el titular del socialismo porteño, Roy Cortina, alineado con Telerman.

El gobierno nacional viene trabajando denodadamente por sumar a dirigentes de este sector. Kirchner le propuso a Jorge Rivas comandar una secretaría –que se crearía ad hoc para hacer un seguimiento de las megacausas por delitos de lesa humanidad–. En un lenguaje prosaico, algo así como una “fuerza de choque” contra el Tribunal de Casación que demora esos juicios.

También hubo ofertas para ocupar la embajada en Nicaragua y algunos lugares en las listas de diputados nacionales de octubre.

Durante los dos últimos jueves, los socialistas que pertenecieron al PSD se reunieron en el Círculo Italiano para definir su apoyo al Gobierno a través de la denominada “concertación plural”. Varios distritos caminan en ese sentido: Catamarca, Córdoba –en rigor aquí la alianza es con Luis Juez–, Neuquén, La Rioja y Santa Cruz. Tomaron distancia así del presidente del partido a nivel nacional, Rubén Giustiniani, quien fogonea un entendimiento con Elisa Carrió.

–Nosotros no vamos a bancar un proyecto con la derecha de Carrió, que va junto a Bullrich y Telerman –consideró Ariel Basteiro, uno de los que ya juega abiertamente con Kirchner desde que asumió la representación del gobierno nacional en el directorio de Aerolíneas Argentinas–. Basteiro participó en las reuniones del Círculo Italiano junto a Rivas y Oscar González, todos provenientes de la provincia de Buenos Aires. Aunque se muestran timoratos, los dirigentes socialistas bonaerenses podrían respaldar de manera crítica la candidatura a gobernador de Daniel Scioli.

“Es muy difícil para nosotros apoyarlo pero no hay opción alternativa por izquierda superadora al gobierno nacional”, consideraron. A buen entendedor... Así, el respaldo a Scioli sobrevendría públicamente a la brevedad, cualquiera fuera su compañero de fórmula. Como se sabe, los aspirantes son numerosos, aunque aparecen como mejor posicionados el canciller Jorge Taiana, la titular del Pami, Graciela Ocaña, el intendente radical Daniel Katz y el senador José Pampuro.

Pum para arriba

A Pampuro le interesa tanto la política partidaria como la deportiva. Hace dos lunes se lo vio en La Raya, un restaurante de la calle Ortiz de Ocampo que se especializa en lengüitas de cordero a la vinagreta. Al presidente provisional del Senado no lo movilizó el plato de la casa sino dos de sus clientes dilectos, Alfio Basile y Reinaldo Merlo.

No fue un encuentro fortuito. Pampuro conoce al técnico de la selección desde hace décadas. Han compartido más de un picado y de una picada en la quinta Los Caudillos, de Hugo Toledo. En ese predio de Ezeiza solía reunirse la “task force” de Eduardo Duhalde.

La mesa no tardó en completarse con otras presencias rutilantes, como la de Carlos Babington y también la de Ramón Díaz. Pampuro es fanático de San Lorenzo y lo une al técnico algo más que una pasión futbolera: sueñan con un proyecto común de la mano de Marcelo Tinelli.

El conductor de “Bailando por un sueño” ya tiene un papel protagónico en San Lorenzo, y no sólo como organizador de la fiesta del centenario sino como sostén económico de tres de las estrellas del equipo de Ramón: Gastón Fernández, Ezequiel Lavezzi y Cristian Ledesma.

Esta semana Pampuro se mostró diligente en la apertura de la peña del viejo gasómetro, en avenida La Plata. El encuentro –frente al Carrefour donde alguna vez se erigió el estadio de El Ciclón– tuvo el declarado objetivo de apuntalar al equipo en la búsqueda del campeonato, pero también de allanar el camino de Tinelli hacia la presidencia del club.

En La Raya no se habló de Tinelli. En cambio, animada por la benevolente intervención de un periodista, o quizá por las últimas gotas de vino, la mesa se prendió en las apuestas boxísticas. Hubo quienes dieron por hecho el triunfo de Oscar de la Hoya, mientras otros pusieron todas sus fichas a Floyd Mayweather.

A Kirchner le hubiese gustado compartir esa sobremesa bullanguera para dar su pronóstico sobre el combate que hoy por la madrugada se desarrolló en el MGM de Las Vegas. El Presidente es un apasionado del box, tanto que en sus años de juventud practicó en forma amateur el pugilato. De estar en ese restaurante de Palermo, se hubiera reencontrado después de mucho tiempo con Merlo. Aquí un dato nunca revelado: poco antes de asumir la dirección técnica de Racing, Mostaza tuvo una cita furtiva con Kirchner en la quinta de Olivos. Sólo ellos saben de qué hablaron. Por entonces, se decía que el Presidente prefería la continuidad de Diego Simeone en la conducción del equipo.

El fanatismo del mandatario por La Academia es de una evidencia pasmosa. El libro El último peronista. La cara oculta de Kirchner, del periodista Walter Curia, lo pinta de lleno. Tres compañeros de convivencia en La Plata, en los años de facultad, recuerdan los episodios de sonambulismo del Presidente: “Gritaba goles de Racing parado al lado de la cama. Lo fuimos a buscar a la calle varias veces”, dice uno de ellos.

La barra de Hadad

La política y el deporte atraviesan al Gobierno como un rayo. Alberto Fernández no fue ajeno a la cena que reconocidos hinchas de Argentinos Juniors mantuvieron hace un mes en el Viejo Almacén. Producto del encuentro, se creó una heterogénea “comisión de notables” para fomentar la educación y el fútbol amateur entre los chicos del club.

Esa tarea se llevará adelante desde la fundación Los Cebollitas –uno de los tantos evocativos de Diego Maradona–, de la que participan desde el CEO y gerente general de Transener, Silvio Resnich, hasta los periodistas Marcos Cytrynblum, Jorge Jacobson y Marcelo Benedetto, pasando por el conductor del ciclo “TV Registrada” Gabriel Schultz.

Se sabe, Fernández es hincha de Argentinos Juniors. Pero más de una vez prestó sus oídos a las desventuras de José María Aguilar. El presidente de River no fue el único que pasó por la Casa Rosada. Agobiado por irregularidades impositivas, el técnico Daniel Alberto Passarella tocó el año pasado el timbre de Balcarce 50.

Por estas horas River es una hoguera. No son pocos los que imaginan que el camino hacia la presidencia del club está expedito. Daniel Hadad es uno de ellos. El empresario de medios atiza una salida anticipada de Aguilar.

–No resiste hasta el 2009 –repite en la intimidad, dando a entender que la actualidad futbolística, social y financiera del club impedirá al mandamás de River cumplir con la totalidad su mandato.

Hadad integra un conglomerado de socios millonarios que agita el fantasma de la convocatoria a una asamblea extraordinaria para separar a Aguilar de sus funciones. La preocupación por el futuro del club es compartida por Alejandro Macfarlane, Jorge Brito (hijo), Francisco De Narváez, Rodolfo “Fito” Cuiña y Antonio Caselli, entre tantos otros. Un dato para entender el ánimo de Hadad y De Narváez: Aguilar les habría prometido en su momento a Canal 9 y América la transmisión de los partidos de River, pero finalmente los desairó. El vínculo de la política con el fútbol es interminable. A riesgo del absurdo, hay que decir que la presidencia del Renar (el Registro Nacional de Armas) está a cargo de Andrés Meiszner, hijo del presidente de Quilmes. ¿A qué no saben de quién es hincha empedernido el ministro del Interior, Aníbal Fernández?