Como hace veinte días, el conflicto por el que se encuentra tomada la Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini se trasladó a la sede del rectorado de la Universidad de Buenos Aires (UBA), donde los estudiantes impidieron que sesionara el Consejo Superior. El órgano de gobierno universitario debía ratificar la designación de Juan Carlos Viegas como rector del colegio, ya que fue nombrado ad referéndum del consejo por el titular de la universidad, Rubén Hallú. Aunque la mayoría de los consejeros ya adelantó que confirmará a Viegas, el vicerrector de la UBA, Jaime Sorín, anunció que un grupo de decanos y consejeros no apoyará al ex vicedecano de la Facultad de Ciencias Económicas.

A las 9, una columna de estudiantes del Pellegrini, junto a un grupo de docentes, no docentes y también padres, se concentró frente al rectorado, para impedir que el consejo ratificara la designación del contador Viegas, que desde fines de mayo intenta asumir como autoridad del colegio. Delante de la entrada del edificio ubicado en Viamonte 430 se podían ver los bombos y oír los gritos de los casi 200 adolescentes que cantaban: “Viegas no va a entrar”. Acompañaban banderas y dirigentes de la FUBA y de los centros de estudiantes de las facultades de Ingeniería, Psicología, Filosofía y Letras, Veterinarias, Ciencias Sociales y Arquitectura.

“No vinimos para impedir que sesionen, sino para que saquen del temario al Pellegrini”, aseguró, megáfono en mano, el presidente del centro de estudiantes del “Pelle”, Julián Asiner. “Vinimos a buscar un compromiso público para que no traten en el orden del día los temas que vamos a hablar a las 5 de la tarde.” Se refería a la reunión que tenían pactada con el secretario general de la UBA, Carlos Más Vélez, quien viene manteniendo, junto a Rosa Neufeld, secretaria de Asuntos Académicos, las negociaciones para intentar destrabar la toma de la escuela, que ya lleva 17 días. En diálogo con este diario, el delegado del gremio AGD, Julio Bulacio, aseguró: “En la mesa de negociación existen avances sobre la titularización docente y en la consolidación de un consejo directivo tripartito con inclusión de los no docentes. También se comprometieron a garantizar el proyecto educativo en marcha, pero tenemos una preocupación: nos dicen que lo que arreglemos deberá ser elevado al Consejo Superior, y allí puede ser que nos voten en contra”.

Mientras los estudiantes hacían tiempo bloqueando el ingreso al edificio, los consejeros superiores del espacio de centroizquierda que encabezan “los 4 decanos”, del que participa el vicerrector Sorín, esperaba alguna noticia sobre la realización de la sesión en un bar cercano. “Cuando se nos preguntó sobre la designación de Viegas, dijimos que no nos parecía la persona indicada, pero el rector Hallú decidió que tenía la mayoría para designarlo y así lo hizo”, comentaba Sorín. Recordó, a su vez, que su espacio propuso “para el Pellegrini una instancia para generar un proceso de discusión dentro del colegio, de la cual surgiera el nuevo rector”, algo similar a lo que proponen los sectores movilizados. El titular del gremio no docente, Jorge Anró, también debió consumir varios cafés en un bar aledaño antes de tomar la decisión de retirarse.

Cerca del mediodía, ninguno de los integrantes del sector mayoritario del Consejo Superior siquiera se había acercado al rectorado. Los estudiantes anunciaron que habían logrado comunicarse con uno de ellos, la decana de Psicología, Sara Slapak: “Nos comentó que la llamaron del rectorado para decirle que no fuera hasta que le avisaran”. Temiendo una maniobra sorpresa, los manifestantes levantaron el corte de calle y se organizaron en grupos de veinte para mantener una guardia frente al edificio hasta las 17. Minutos después llegaba la confirmación: la sesión se levantaba. Más tarde volvía a reunirse la mesa de negociación. Hubo avances en algunos puntos y se decidió pasar a un cuarto intermedio hasta hoy, cuando retomarán el diálogo. Mientras, en la escuela continúa la toma con dictado de clases.