Mauricio Macri partirá este fin de semana a un descanso en París y a su regreso avanzará en la definición de lo que hará cuando asuma como jefe de Gobierno porteño, aunque hay algunas cosas que ya tiene resueltas: ayer confirmó el cierre del canal Ciudad Abierta y también el desmantelamiento de la Guardia Urbana. “Hacer experimentos en televisión que tienen cero rating y cuestan 14 millones de pesos me parece una falta de respeto absoluta a la ciudadanía”, explicó Macri y definió como “una estafa” a la Guardia Urbana, a cuyos agentes anticipó que les dará la opción de “recapacitarse” o “irse a su casa”.

La continuidad del Ciudad Abierta, creado cuando Jorge Telerman se desempeñaba como secretario de Cultura de Aníbal Ibarra, fue motivo de conversación en la reunión que el actual jefe de Gobierno y su electo sucesor mantuvieron anteayer para acordar los términos de la transición. “Creéme que no te conviene”, le dijo Telerman a Macri a propósito de sus intenciones de bajar la persiana del canal.

La sugerencia parece haber caído en saco roto. “Como mínimo se va a gastar una cifra mínima”, respondió Macri al ser consultado en Radio Del Plata sobre el futuro del canal. En diálogo con Radio Uno, precisó minutos después que la estructura de Ciudad Abierta será “desmantelada”, con lo cual quedó claro que el “mínimo” que piensa gastar es el papel y la tinta que requieran los trámites administrativos para su cierre.

“En una ciudad donde tenemos mucha gente por debajo de la línea de pobreza, donde hay problemas de mortalidad infantil y de vivienda, dedicarnos a hacer experimentos en televisión que tienen cero rating y cuestan 14 millones de pesos, me parece una falta de respeto absoluta a la ciudadanía”, afirmó Macri en referencia a Ciudad Abierta. Los números de Macri difieren de los dados por el gobierno porteño, que precisó que el canal tiene un presupuesto de 8 millones de pesos y una planta de 130 empleados.

El jefe de Gobierno electo sostuvo que “tener un canal en esas condiciones ha sido un atropello al ciudadano y nosotros no queremos ese tipo de gastos” y agregó que “no hay que pasarse de la raya haciendo cosas para que amigos de los que están en el poder se diviertan haciendo televisión”. También indicó que “no hay que ser tan creativo y generoso con el dinero ajeno, sino tener un sentido de la responsabilidad” y sostuvo que sería mejor que el presupuesto asignado a Ciudad Abierta se aplique “a que el Colón esté abierto, a que el San Martín tenga una buena programación o a que funcionen las escuelas o los programas de cultura a cielo abierto”.

Macri también pasará su guadaña por la Guardia Urbana. “Demanda un montón de plata y la gente nunca entendió para qué servía”, se quejó. Sobre el futuro de las 800 personas que integran ese cuerpo adelantó: “Se les va a dar la oportunidad de que se recapaciten. Si lo hacen, continuarán; si no, no”. Un clásico de los ’90. Los destinos alternativos podrían ser cumplir “funciones de tránsito” o “cuidar las plazas”.

“Como concepto, la Guardia Urbana no ha funcionado”, se sumó Horacio Rodríguez Larreta, quien insistió en reclamar la entrega del gobierno porteño con “déficit cero” y sin ñoquis. “Telerman quedó en abrirnos toda la información de cada área de gobierno para ver la situación de los recursos humanos. Todo el mundo coincide en que si encontramos gente que no trabaja, se tiene que ir. Hasta el propio gremio dijo el otro día que no iba a defender a la gente que no trabaja”, declaró el futuro jefe de gabinete porteño.

Rodríguez Larreta comentó también que “las obras que sean necesarias y estén bien, las vamos a mantener y finalizar”. Al respecto, expresó que “nuestro concepto es que todo lo que se está haciendo bien hay que continuarlo y potenciarlo. Por ejemplo, las remodelaciones de las plazas, o en el tema de la basura, coincidimos con los contenedores”. Añadió en esa línea que “si los planes de vivienda y sociales están funcionando bien, hay que darles continuidad”, pero habló de “evaluar caso por caso”.