Margarita Stolbizer se presentó anoche como la candidata radical para la gobernación de Buenos Aires. En La Plata, donde funciona la Junta Central partidaria y ante la sorpresa de los suyos, que se mostraron exultantes por la convocatoria de público, Stolbizer ratificó que no piensa abandonar la Unión Cívica Radical. “No pienso regalarle mi historia de vida ni mis convicciones a ningún sinvergüenza”, dijo. Anteanoche, en el Comité Provincia, el radicalismo bonaerense había presentado la fórmula Ricardo Alfonsín-Luis Brandoni.

A diferencia de la candidatura oficial, que en las presidenciales de octubre se encolumna con Roberto Lavagna, Stolbizer anunció que apoyará a Elisa Carrió. La existencia de dos fórmulas radicales se dirimirá en la Justicia electoral y también en la política. Anteayer, Alfonsín había adelantado que esperaba que Stolbizer fuera sancionada.

Anoche, la ex diputada defendió la tradición histórica del radicalismo. Cuestionó al titular nacional de la UCR, Gerardo Morales, y también al bonaerense Leopoldo Moreau, a quienes acusó de ser parte de los dirigentes que vaciaron ideológicamente al partido de Leandro Alem. Les cuestionó a estos dirigentes haberse asociado “con los mismos que gobernaron la provincia de Buenos Aires durante veinte años”. También dijo que “se mostraron complacientes con el modelo de acumulación y corrupción que el peronismo bonaerense implementó en la provincia”.

“Frente a los agravios y las estupideces de algunos dirigentes que provocaron el vaciamiento ideológico, les decimos que no nos vamos de la UCR”, destacó Stolbizer en uno de los pasajes más aplaudidos.

El local partidario desbordaba y la calle mostraba un lleno como en las mejores épocas. Entusiastas, los margaritos aseguran que el público superaba las 1200 personas. Especialmente para la ocasión habían sido invitados dirigentes del ARI bonaerense y del Partido Socialista de Buenos Aires. Stolbizer endulzó sus oídos cuando afirmó que era imprescindible construir un frente progresista en la provincia. En ese espacio ubicó al ARI, al socialismo y “a otras expresiones políticas”.

Antes que ella, hubo discursos de referentes de la Juventud Radical y de representantes de algunos comités provinciales. A diferencia de otros actos, el objetivo era mostrar que la candidatura de Stolbizer surgía de una “asamblea partidaria”. La dirigente no sólo insistió en recuperar las estructuras partidarias para “volver a ser el partido de la honradez y la decencia frente a la corrupción”, sino también para plantarse frente a un modelo nacional. Boinas blancas, banderas de Franja Morada y la marcha partidaria marcaban el contexto. “Se recuperó la mística radical”, resumió a este diario uno de los presentes.