Lun 01.10.2007

EL PAíS  › ELECCIONES LEGISLATIVAS EN CORRIENTES ENTRE LOS DOS COLOMBI

La guerra de primos la ganaba Arturo

En un combate de clan, el gobernador le ganaba a su primo Ricardo por unos once puntos, con la mitad de las mesas escrutadas. Se votaban senadores y diputados provinciales y también la distancia del radicalismo al gobierno.

La puja clánica entre los primos Colombi anoche se cerraba con el triunfo de la lista del actual gobernador. Arturo Colombi le ganaba a su primo Ricardo por unos 11 puntos de ventaja con 759 mesas escrutadas sobre un total de 1818, al cierre de esta edición. Con niveles de ausentismo notables hasta entre las autoridades de mesa, los primos terminaron polarizando los resultados de las elecciones correntinas que se convirtieron en una suerte de interna abierta radical. Hacia adentro se jugaron las bancas de diputados y senadores, pero hacia afuera se disputó a sangre y fuego la cercanía o distancia del radicalismo con el Gobierno nacional.

Seis frentes electorales pelearon ayer en la provincia 13 bancas de diputados, 5 del senado, 79 concejales en 41 municipios y un intendente de la ciudad de Garruchos, al noreste provincial. Ese tono provincial de la elección y el carácter de los protagonistas de las listas en juego fueron parte de las razones de los dos escenarios en juego. Por un lado, el provincial que motorizó y movilizó el voto de la gente. Y por otro el nacional, que al parecer movió y movilizó a los dirigentes.

De los seis frentes, las dos alianzas electorales más importantes llevaban los nombres de los Colombi. Los primos radicales se alternan en el gobierno desde 2001. Ricardo fue gobernador entre 2001 y 2005, y Arturo es gobernador desde entonces. Llegaron juntos y se mantuvieron como referentes del radicalismo K, hasta los últimos meses, cuando Ricardo se alejó. Arturo llegó a las elecciones encabezando el Frente de Todos, con aliados del justicialismo, liberales y partidos menores. Ricardo lo hizo con el Frente para los Correntinos, apoyado por el lavagnismo y Gerardo Morales y un espectro local de liberales, de Nueva Dirigencia, Frente Popular y el Partido Socialista.

Al cierre de esta edición, en las elecciones a senadores los arturistas sacaban 42,45% sobre 31,99% de los ricardistas, y en diputados iban 41,65% a 27,56%. En tercer lugar se inscribió Nueva Propuesta, del partido de Romero Feris, con 9,99% en senadores y 10,84% en diputados. Le seguían el Frente Primero Corrientes y la Propuesta Alternativa republicana, y al finalizar en contra de sus propias previsiones el frente kirchernista puro donde se sumaban integrantes del Movimiento Evita con 2,37 por ciento de votos en senadores y 2,33 en diputados.

Ricardo Colombi, que ahora es diputado nacional, va como primer candidato al Senado de su provincia, con la promesa de renunciar al Congreso nacional. Detrás de todo esto, está la pelea interna por la sucesión en 2009.

Por fuera de la provincia jugó el radicalismo oficial. Hasta hace treinta días, para impedir cualquier alianza con los radicales K, la UCR pidió la intervención del partido y desembarcó en la provincia. El viernes pasado, la jueza María Romilda Servini de Cubría volvió a dar por válido el pedido. José Luis Bellia es el interventor de la UCR de Corrientes; en diálogo con Página/12, ayer analizaba los resultados de las elecciones en la provincia. “Hay que considerar a estos resultados en sus dos escenarios”, indicó. “Si hoy le va bien, el 28 de octubre el radicalismo va a tener un potencial de votos importante, pero hay que recordar que esto es una elección provincial con características muy locales, donde el radicalismo institucional demuestra que tiene preponderancia, pero no puede decir que el caudal de votos que saca Ricardo Colombi sea completamente transmisible al lavagnismo.” Según su análisis, hay radicales con Arturo y con Ricardo, pero también hay otras fuerzas políticas, como el justicialismo, que harán sus propios acuerdos en octubre.

Pero ésos no fueron los únicos resultados. Como sucedió en febrero para las elecciones de convencionales, el ausentismo fue notable. Según datos de la agencia Télam, un 60 por ciento de los 657.494 correntinos habilitados a votar no concurrió. El faltazo también alcanzó a los presidentes de mesa. Cronistas del diario La Epoca notaron que “la mayoría” de las escuelas de la Capital abrió las urnas luego de las 9 por esa razón. Los primeros votantes tuvieron que cubrir a los ausentes.

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