Apenas puso un pie en tierra mendocina –ayer no hubo accidentes ni trompos–, Cristina Kirchner se topó con la compleja realidad de la provincia de su compañero de fórmula. En el aeropuerto la recibió el gobernador radical Julio Cobos; una hora más tarde se encontró con los dos grupos enfrentados que apoyan su candidatura. Por un lado, los radicales que siguen a Cobos y acompañan a César Biffi y Enrique Thomas como postulantes a gobernador y vice; del otro, los peronistas que impulsan para la gobernación al senador Celso Jaque y a Cristian Racconto. La visita a Mendoza podría interpretarse como otro gesto de la Rosada para desmentir las versiones sobre un supuesto alejamiento entre CFK y Cobos. Durante el acto, vaticinó que los argentinos ratificarán el rumbo de los últimos cuatro años. “Creo que es el deseo de todos los argentinos y argentinas que sigamos construyendo en esta dirección.”

Esta vez CFK no viajó en un avión alquilado sino en el Tango 03. La acompañó sólo el vocero presidencial, Miguel Núñez, quien también estuvo con la primera dama cuando el Lear Jet de la empresa Baires Flight se salió de la pista del aeropuerto de Santa Fe. La candidata del Frente para la Victoria había sido invitada a Mendoza para inaugurar la única bioplanta de producción de insectos estériles de la Argentina. Este sistema consiste en criar insectos de una especie determinada, luego esterilizarlos y finalmente liberarlos en la naturaleza para que se apareen con las hembras silvestres de esa misma especie: así las hembras no dejan descendencia y se corta el ciclo biológico natural. Curioso.

Escoltada en todo momento por Cobos –quien luego acompañó a la candidata hasta Neuquén, la otra escala de su gira–, CFK dijo que es necesario garantizar la continuidad de ciertas políticas de Estado. “El gran desafío está ahora en que podamos construir una institucionalidad diferente, de modo tal que estas políticas sean de todos los argentinos, no de un partido, para que nunca más a nadie se le ocurra hacernos creer que si no trabajamos y si no producimos, vamos a estar en el Primer Mundo”, dijo. Desde el palco, la candidata volvió a referirse a los tópicos de su campaña. “Que las políticas sean institucionalizadas y entonces las elecciones sean un debate de cómo educar. Siempre va a haber reclamos porque el mundo no existe sin conflictividad social”, destacó.

Debajo del escenario se veían pancartas y carteles de la Concertación Plural; también había inscripciones que invitaban a votar a la fórmula peronista. Tras dejar el aeropuerto, CFK y Cobos se dirigieron a la bioplanta de producción de insectos estériles. La planta en cuestión está a 95 kilómetros de la ciudad de Mendoza, tiene una superficie de 17 mil metros cuadrados cubiertos y contará con 130 trabajadores. “Esto es un ejemplo para el mundo. No es un logro sólo de los mendocinos sino de todos los argentinos poder demostrar este grado de innovación tecnológica aplicado a procesos económicos”, elogió CFK.

Antes de terminar su discurso, la candidata no dejó pasar la oportunidad de defender a su compañero de fórmula. En Mendoza había circulado la versión de que la Rosada había otorgado un “salvataje financiero” a la provincia. “Hoy el gobernador me decía, triste, ¿viste lo que publicaron en Buenos Aires? Que el gobierno nacional les dio a los mendocinos dinero para sus jubilados, cuando es exactamente al revés. Es Mendoza la que en un convenio con la Nación coloca dinero de sus propios recursos para hacer frente al 82 por ciento móvil de sus jubilados”, respondió la candidata.