Nos habíamos amado tanto

Se juró no hablar. Pero la pelea con Eduardo Duhalde por el control de la provincia de Buenos Aires le está provocando una úlcera. Por eso en la intimidad no deja de hacer catarsis, mostrándose lejos de su acostumbrada postura diplomática. Este fin de semana, por ejemplo, se lo vio muy suelto de lengua apuntando contra algunos periodistas y el Gobierno. De los primeros –en el que se incluyó a Daniel Hadad– ya se había ocupado su mujer, Teresa “Teresita” del Valle González. Del inquilino de la Casa Rosada se encargó Solá personalmente. “Estoy harto de que el senador a cargo de la presidencia diga una cosa y haga otra”, descalificó, cansado porque –dice– primero recibió de Duhalde el respaldo para revalidar el título de gobernador y después escuchó como lanzaba la candidatura de su mujer Chiche.

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Desayuno con buen aliento

El se preocupó en contarle la experiencia de su movimiento. Ella le habló del frente con el que busca hacer realidad el reclamo del “que se vayan todos”. El le preguntó sobre cómo enfrentar el lobby de las trasnacionales, y en particular de las petroleras. Ella sobre la representación parlamentaria que tenía el movimiento cocalero. A la hora y media en punto, los dos dejaron el café y las medialunas para saludarse. Como hace al cierre de sus actos, Elisa Carrió lo despidió de su departamento, en la avenida Santa Fe, con un “hasta siempre”. Y el diputado boliviano, Evo Morales, quien visitó Buenos Aires para participar del Foro Social Mundial, conocedor del retroceso de la titular del ARI en las últimas encuestas, le dio aliento: “A mí me daban cuarto, y gané.”

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Fabio Zerpa tiene razón

Fue el viernes por la noche, mientras varios de sus correligionarios –como Angel Rozas, Rodolfo Terragno y Osvaldo Alvarez Guerrero– pergeñaban la manera de presentarle competencia. Pero poco le importó. Al precandidato a presidente radical se lo veía muy a gusto, disfrutando de los platos de Lezama, un reconocido restaurant frente al parque homónimo, en La Boca. Como viene la mano, la suerte estuvo de su lado. Es que Leopoldo Moreau, de elegante sport y buena compañía, tuvo la dicha de que no lo escracharan. ¿Será por eso que le dicen “Marciano”?

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Me sube la bilirrubina

A los que lo consideran tibio. A los que lo achacan de dubitativo. A los que se engolosinaron llamándolo “el De la Rúa del peronismo”. A todos ellos pareció dedicarle Carlos Reutemann su retorno a la Casa Gris, como se conoce la sede de gobierno santafesina. El Lole, quien estuvo un mes recuperándose de una operación del Talón de Aquiles, no se anduvo con chiquitas. En apenas un par de días descabezó a su gabinete –hoy hará la presentación del flamante equipo–, haciendo punta con los ministros de Economía, Juan Carlos Mercier, y Salud, Carlos Parola, quienes asomaban con algunas chances para sucederlo en el 2003 ya que no existe la posibilidad de su reelección. Como lo graficó un colaborador al ex Piloto de Fórmula Uno. “Se muestra frío como el hielo, dicen que es tibio, pero, la verdad, está recaliente”. Más claro, echale agua.

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Si entre ellos se pelean

El menemismo hará formalmente pie en la Capital. Esta vez, a través de la candidata a jefa de Gobierno porteño Kelly Olmos, recordada entre otras cosas por encabezar los escraches al juez federal Jorge Urso, quien el año pasado dispuso la detención de Carlos Menem. Kelly buscará mojarle la oreja a Daniel Scioli, instalando la sede central de la junta promotora “Menem Presidente” en Corrientes al 2900, a sólo tres cuadras de la del exmotonauta, quien solía visitar al ex mandatario durante su reclusión en Don Torcuato. ¿Por qué tanta inquina? Los acólitos del riojano achacan a Scioli de haber pasado a las filas del duhaldismo desde que fue nombrado secretario de Deporte y Turismo del Gobierno.

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Rebelde way

A pesar del respaldo de Eduardo Duhalde al precandidato del PJ José Manuel De la Sota, ya hay varios funcionarios de la Casa Rosada que comenzaron a blanquear su apoyo a otro postulante: el puntano Adolfo Rodríguez Saá. Ese es el caso de Pablo Challú, ex secretario de Comercio y actual asesor del Ministerio del Interior en la coordinación del Plan de Centros de Abaratamiento. No es novedad para los que conocen los vínculos del economista con el jefe de la CGT rebelde, Hugo Moyano, quien ya se encolumnó detrás del puntano. El apoyo de Challú será a través de la Red Nacional y Popular, que se presentará mañana en la Sociedad Italiana de Socorro Mutuo, en el Barrio de Belgrano, y que participará del acto de Rodríguez Saá previsto para el jueves en el Luna Park.