Desde Rosario

Abel Beroiz, secretario general del Sindicato de Camioneros de Venado Tuerto y hombre de confianza del secretario general de la CGT, Hugo Moyano, fue atacado ayer a la mañana por dos hombres en las cocheras del Automóvil Club Argentino (ACA) de San Luis y San Martín, quienes huyeron en un taxi luego de perpetrar el ataque. Beroiz, de 70 años, fue internado en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, donde fue intervenido quirúrgicamente, y su estado era grave por las dos puñaladas y los tres impactos de bala que recibió en el tórax. El titular de la seccional 2ª, Sergio Coronel, confirmó que Beroiz fue encontrado “en el primer subsuelo del estacionamiento tras ser abordado por dos jóvenes, uno con un arma de fuego que le disparó cuando bajaba del auto. Podría haber sido atacado también con un arma blanca, ahora seguiremos con las pericias, aunque el móvil aún no lo pudimos establecer”.

Beroiz estaba en Rosario para negociar la compra del sanatorio Güemes, para ser destinado al Sindicato de Camioneros de la ciudad. Esta gestión no era extraña para el gremialista, quien había llevado adelante la compra de un sanatorio en Venado Tuerto, destinado a los afiliados del sindicato. Luego de dormir la noche del lunes en un hotel céntrico, el dirigente gremial se dirigió a buscar su automóvil, un Volkswagen Passat, en las cocheras subterráneas del ACA, ubicadas en la cortada Barón de Mahuá y San Luis, en la Plaza Montenegro.

Según el testimonio de Diego, un empleado del lugar, alrededor de las 6.40 de la mañana “el señor vino a pagar un ticket y a retirar el auto. Luego sentimos que el hombre gritaba, vemos a otro que amenaza sacar un arma de su cintura y nosotros nos escondemos. Cuando nos volvemos para atrás sentimos los disparos. Cuando salimos, no había más movimientos y vimos al señor tirado al lado del auto. De inmediato llegó una ambulancia junto a la policía y se lo llevaron”.

Varios testigos señalaron que a uno de los atacantes lo vieron corriendo por San Juan con una herida en su brazo y huyó a bordo de un taxi que circulaba por la zona o bien lo estaba esperando. En el lugar, la policía secuestró un cuchillo y un proyectil de un arma calibre 38.

“El estado es crítico, luego de las primeras 48 horas se podrá hacer un pronóstico más acertado. El paciente sale de la cirugía con asistencia mecánica respiratoria, y presentaba heridas en el abdomen y en el tórax de jerarquía”, precisó Ricardo España, jefe de Guardia del HECA. Según los detalles médicos, estuvo a punto de la evisceración, debido a la gran profundidad que tenían los cortes que le produjeron en el abdomen.

Por su parte, una hermana del gremialista señalaba que Beroiz “había perdido mucha sangre” y que su estado era muy grave. La mujer agregó que a su hermano lo estaban esperando en el lugar para atacarlo y también supone que no se trató de un robo.

Si bien no se descarta ninguna hipótesis, las investigaciones apuntan a un hecho ligado a una posible interna del gremio. En este sentido, Alfredo Aramayo, secretario personal de Hugo Moyano, aseguró ayer que no hay internas en ese gremio, al referirse al ataque sufrido por Abel Beroiz en Rosario, cuyas motivaciones dijo desconocer.

“La información que nos pasaron nuestros compañeros de Rosario es que el compañero Abel Beroiz salía del hotel para ir a buscar su auto. Como de costumbre, es un compañero que siempre andaba solo, inclusive él viajaba solo en su coche. Estuvo ayer (por el lunes) acá, en la federación de camioneros, y partió (hacia Rosario) como siempre, solo”, precisó Aramayo en declaraciones radiales.

“No manejamos ninguna otra información más que la que acabo de decir. Es un compañero con una conducta intachable, un compañero muy trabajador, que jamás hacía ostentación de nada”, concluyó Aramayo. La causa quedó a cargo del juez de Instrucción Penal Osvaldo Barbero, con la intervención de la Sección Homicidios de la policía y la comisaría 2ª.