EL PAíS › LOS ESPECIALISTAS OPINAN SOBRE EL CASO
› Por Raúl Kollmann
“Para los que somos jueces, decir que lo de Antonini Wilson es una investigación judicial y no una iniciativa política del gobierno norteamericano, es una especie de caza-bobos –analizó ante Página/12 un juez del fuero Penal Económico–. Hay una primera decisión, que no es judicial, sino política y que consiste en no extraditar a Antonini Wilson a la Argentina. Ese proceso se ralentizó porque negociaban con Antonini su colaboración para involucrar a sus socios venezolanos, los ahora detenidos. Y hay una segunda decisión que es política y no judicial –siguió explicando el magistrado– que consiste en reemplazar el envío de Antonini a la Argentina por una investigación sobre esos socios venezolanos, con el objetivo, también político, de apuntar contra (Hugo Chávez). Es una investigación agregada y siempre que algo así se pone en marcha, la decisión es política. A esto súmele que hay un comunicado oficial del Departamento de Justicia que convalida afirmaciones de los detenidos, que pueden ser verdaderas o falsas, en las que se afirma que el dinero fue para la campaña electoral argentina. Es como si hubiera un comunicado del Ministerio de Justicia argentino señalando que ‘El Gordo’ Valor afirma que robaba bancos para apoyar a un candidato norteamericano.”
Página/12 consultó a jueces con experiencia en expedientes en los que se le pidieron extradiciones a Estados Unidos. Y también dialogó con un político radical que revistó en la plana mayor de la SIDE en la época del gobierno de Fernando De la Rúa.
“No está claro si Antonini Wilson fue reclutado como arrepentido por el FBI después de que estallara el escándalo de la valija o ya trabajaba para ellos desde antes –analizó el hombre que pasó por el mundo del espionaje–. En cualquier caso, parece cantado que tenía encima una amenaza de pasar largos años en prisión y le canjearon eso por la entrega de sus socios venezolanos. Con los ahora detenidos, Antonini tenía, desde hace años, domicilios y sociedades en común. Siempre sucede que los arrepentidos le dicen al FBI y a los fiscales lo que éstos quieren oír, porque justamente necesitan salvar su pellejo. Y aquí entra la política. Es obvio que a Washington le interesaba involucrar a Venezuela y a Chávez mismo en el asunto. Por eso, estoy seguro que ya hay otro proceso de negociación en marcha con los detenidos del miércoles. Ya les deben estar diciendo: ‘Ustedes afrontan veinte años de prisión si no colaboran’. Y de ahí es muy probable que salga una fuerte acusación contra el propio Chávez o sus hombres más allegados. Y lo que digan puede ser verdad o puede ser mentira. Puede ser que el dinero que traía Antonini se haya originado en negocios turbios de empresarios chavistas y tenía como destino Uruguay, que es una especie de paraíso fiscal. Escapaban por esa vía al control de cambios en Venezuela. Parece muy poco creíble que los fondos tuvieran como destino solventar la campaña electoral oficialista, porque no creo que el oficialismo haya necesitado ese dinero. Pero no podemos descartar que los 800.000 dólares fueran para pagar alguna coima a un funcionario argentino por algún negociado. Lo concreto es que a través del FBI se cambió una investigación en la Argentina, en la que Antonini era el principal imputado, por un expediente en Estados Unidos donde el acusado será Chávez. Y eso es político”, redondeó el ex cuadro de la SIDE.
Para el magistrado del fuero Penal Económico, “la movida de las detenciones en Miami tiene un ropaje judicial, pero la esencia es política. Que exista un comunicado oficial del Departamento de Justicia muestra el perfil. Cuando un gobierno habla, la cuestión es política. Ojo que no estoy criticando, sino haciendo un análisis de lo ocurrido. Es casi seguro que los detenidos amenazaban a Antonini Wilson y las grabaciones deben estar. Pero que el dinero era de Chávez para la campaña electoral argentina, no suena creíble, entre otras cosas porque sabemos desde hace décadas que los fondos para apoyar a los partidos que quieren apoyar se mueven por valijas diplomáticas. Son años y años que nosotros, los jueces en lo penal económico, actuamos en causas sobre lo que se ingresa ilegalmente al país, pero nunca fondos con ese destino, porque van por la otra vía, la diplomática”, sostuvo el juez.
El magistrado, especialista en delitos económicos, continuó: “Ahora lo previsible es que alguno de estos detenidos se convierta rápidamente en arrepentido y tal vez haya más declaraciones judiciales contra Chávez y su entorno. Uno de los grandes problemas es que, en ese marco, es casi imposible que Estados Unidos acceda a la extradición de Antonini Wilson. Y eso trae como consecuencia una enorme dificultad para que avance el expediente más importante, el del movimiento de los 800.000 dólares. Fíjese que en Estados Unidos no existe una causa por ese delito. El avión no salió de allá sino de Venezuela, el dinero no salió de Estados Unidos sino de Venezuela, los pasajeros de la aeronave no eran norteamericanos, sino venezolanos y argentinos, y la plata no entró a Estados Unidos sino a la Argentina. Pese a eso, los norteamericanos armaron una causa allá, negando la extradición de Antonini Wilson para que se investigue acá”.
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