Mié 13.02.2008

EL PAíS  › MORALES REUNE AL COMITE NACIONAL DE LA UCR

En busca de muestras de fe

El presidente de la UCR, Gerardo Morales, arrancará mañana una gira por diferentes provincias para tratar de recuperar la iniciativa tras el golpe que significó para el partido el acuerdo de Roberto Lavagna con Néstor Kirchner. La conducción del radicalismo tiene un doble desafío: resistir los embates de los radicales K que pretenden quedarse con el control de la estructura partidaria y sobrellevar las diferencias internas que empezaron a surgir entre quienes acompañaron la estrategia oficial de apostar a la candidatura del ex ministro de Economía. Antes de emprender viaje, Morales presidirá hoy en ese marco una reunión del Comité Nacional.

El objetivo del encuentro que la conducción de la UCR mantendrá hoy al mediodía en la sede partidaria de Alsina y Entre Ríos es empezar a definir el plan de reafiliación masiva que Morales y quienes lo acompañan impulsarán para depurar los padrones partidarios. Con el claro propósito de dejar fuera del partido a los radicales K, las autoridades del radicalismo pretenden imponer una obligación a todo aquel que quiera mantener su afiliación: que ratifique su “fe doctrinaria”, es decir, que declare su adhesión a lo resuelto en la Convención de Rosario, donde se ratificó el perfil opositor de la UCR.

Morales visitará mañana Paraná y Villa Constitución, el viernes irá a Formosa y Resistencia y luego viajará a Corrientes, una provincia gobernada por el radical K Arturo Colombi, en la cual el partido está intervenido. Lo acompañarán el titular del bloque de senadores radicales, Ernesto Sanz, y Guillermo Illia, sobrino del ex presidente Arturo Illia.

El desplante de Lavagna empezó a hacer evidentes las diferencias que existen entre los radicales que no comulgan con el kirchnerismo y es posible que queden expuestas también en la reunión de la conducción partidaria. La agencia DyN difundió ayer una opinión del titular del radicalismo de Córdoba, Mario Negri, de que “el problema que tiene la conducción es que está actuando sin margen de maniobra y sin legitimidad”. Negri desmintió a Página/12 haber dicho eso, pero la frase agitó aún más la ya de por sí movida interna radical alimentada desde diversos sectores.

“Sería saludable para la UCR que hubiera una depuración dentro del padrón de afiliados del partido; es más, los que quieran renunciar lo pueden hacer, es preferible quedarse con los afiliados que se sientan auténticamente radicales”, señaló, por ejemplo, el capocómico Nito Artaza. Ricardo Alfonsín, por su parte, negó que el alfonsinismo busque un acuerdo con los K, pero no les cerró la puerta: “Si lo que quieren es regresar para llevar el partido al kirchnerismo, quienes estén habilitados tendrán que reorganizarse en el partido para confrontar en una elección interna”.

(Versión para móviles / versión de escritorio)

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS rss
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux