“Dijo un disparate.” “Está extremadamente desubicado.” Funcionarios y militantes K hicieron fila para criticar a Eduardo Duhalde por haber comparado a Néstor Kirchner con Hitler. Abrió el fuego el ministro de Justicia, Aníbal Fernández, que opinó que lo del ex gobernador bonaerense había sido una “bestialidad”. Fernández apuntó que Kirchner “puede gritar más o puede gritar menos, puede ser más simpático o menos simpático, pero compararlo con un señor que fue el verdugo de seis millones de judíos, solamente porque eran judíos o gitanos o negros o con algún tipo de minusvalía física, es de una brutalidad inaceptable”.

Desde La Cámpora, le recordaron a Duhalde su propio currículum. El referente de la agrupación José Ottavis consideró que “Hitler y Mussolini tuvieron pares en la Argentina, que fueron (Jorge) Videla y (Emilio) Massera, casualmente los mismos tipos por los que Duhalde hizo todo lo posible para que no sean juzgados. Dice estos disparates porque no puede digerir la paliza electoral que les dimos”.

“Duhalde está extremadamente desubicado”, opinó por su parte el presidente de la Federación Argentina de Municipios (FAM) e intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra. El jefe comunal relativizó la posibilidad de que Duhalde logre rearmar su estructura política en territorio bonaerense de cara a las elecciones internas que a fines de año renovarían el PJ provincial. “No he visto movimientos, no lo veo como una estructura política, pueden tener algunas adhesiones desde sectores opositores a los intendentes del PJ, pero no le veo futuro al duhaldismo en la provincia”, sostuvo.

Otro que sumó un cuestionamiento fue el ex intendente de Córdoba, Luis Juez, quien señaló que “si la solución a los problemas del país la tienen los mismos que lo fundieron, estamos al horno”. Y la vicepresidenta de la Cámara de Diputadas, Patricia Vaca Narvaja, para quien “Duhalde ha perdido la compostura, está adoptando actitudes que contribuyen a debilitar a un gobierno democrático y así es funcional a los sectores del poder económico que boicotean una gestión que pretende mejorar la redistribución del ingreso”.

Las declaraciones que reactualizaron la guerra entre Duhalde y Kirchner fueron formuladas por el ex gobernador bonaerense el pasado jueves, cuando Duhalde dijo que Kirchner, por su forma de manejar el poder, había sufrido “un evidente deterioro psicológico”. Para Duhalde, la evidencia fue el acto en la Plaza del Congreso antes de la votación del proyecto de retenciones móviles, en el que Kirchner, apuntó, “hacía acordar a esos oradores como fue el führer o Mussolini, una cosa grotesca”.

Ayer, ante las reacciones que generaron sus palabras, Duhalde dio marcha atrás y dijo que estaba arrepentido. “Dije cosas que no tenía que haber dicho”, sostuvo en Entre Ríos poco antes del acto con Busti. El exabrupto obligó al propio Busti a diferenciarse. “Eso corre por cuenta de Duhalde, yo de ninguna manera digo esto ni descalifico a Kirchner ni a nadie con estas cosas”, tuvo que salir a aclarar el ex gobernador entrerriano.