Carlos Menem le solicitó ayer al juez Norberto Oyarbide que apartara a la Oficina Anticorrupción de la investigación penal sobre la cuenta que el ex presidente abrió en Suiza en 1986 y que ocultó en sus declaraciones al fisco. Un día después de que el organismo estatal –que encabeza José Massoni– reclamara a la Justicia el procesamiento de Menem por la “omisión maliciosa” de la cuenta, Alejandro Novak –defensor del precandidato justicialista– afirmó en un escrito que la Oficina “sigue impulsando el proceso como si fuera” parte de la querella, aunque según el abogado nunca asumió ese rol. La defensa también advirtió que podrían declararse nulos los actos derivados de medidas propuestas por la Oficina y pidió “que se desglosen inmediatamente todas y cada una de las presentaciones efectuadas” por el organismo que conduce Massoni, incluido el pedido de procesamiento de Menem. El actual precandidato justicialista fue convocado a declarar en tres oportunidades por Oyarbide en esta causa, pero nunca abrió la boca: primero pidió y consiguió una postergación de la audiencia, luego faltó a la cita judicial y finalmente se amparó en su derecho constitucional de negarse a declarar.