“Las formas por las cuales puede cambiar la composición de un tribunal de la jerarquía de la Corte son: por muerte, por renuncia, por jubilación o por enjuiciamiento. La quinta forma, es decir, tirarlos por la ventana no existe, no está previsto en la Constitución”, dijo ayer el ministro de Justicia, Jorge Vanossi. Con la frase intentaba depositar en el Congreso o en la “conciencia” de los propios jueces del alto tribunal la responsabilidad sobre su continuidad. Pero también fue inevitable que reflotara el recuerdo del pedido de juicio político que tuvo uno de los actuales supremos, Augusto Belluscio, después de que su socia cayera al vacío por la ventana del hotel donde paraban juntos en París.