“Con Kirchner, donde quiera, vamos a hablar de inseguridad”, desafió ayer el ex gobernador bonaerense Felipe Solá, en respuesta a las críticas que le lanzó Néstor Kirchner por la persistencia del problema en la provincia. Solá dijo que el titular del PJ “es un caradura” por haber dicho que él, durante su paso por el Ejecutivo provincial, no pudo resolver el tema del delito en territorio bonaerense. Desde la gobernación bonaerense, el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Carlos Stornelli, salió a responderle a Solá, que, según dijo, “debería guardar silencio porque él gobernó la provincia durante seis años y parece haber descubierto ahora la inseguridad”. Menos directo, el secretario general de la gobernación bonaerense, José Scioli, dijo que le “resulta llamativo que dirigentes que acompañaban el proyecto nacional hoy agravian al ex presidente”. Se refería a que Solá encabezó la lista de diputados del FpV en la última elección.