El pedido lo hicieron diecinueve intendentes del sur del conurbano en una carpa estructural montada al lado de la Municipalidad de Lanús.

–Daniel, tenés que ser candidato –plantearon casi al unísono.

La respuesta fue tajante y tranquilizó a todos.

–Si el proyecto necesita que yo vaya a diputado, yo voy.

Colocado de pronto en el centro de la política argentina, el gobernador Daniel Scioli parece haber elegido la alternativa que algunos ven como la más lógica para la supervivencia del proyecto iniciado en 2003. Ante la elección más compleja de los últimos años, en un contexto de incertidumbre condicionado por la crisis global, el oficialismo pondrá sobre la cancha todo lo que tiene. Y eso significa que la lista llevará a los mejores candidatos con los que cuenta el peronismo bonaerense. Y la estrategia de poner toda la carne en el asador se extenderá a los municipios.

–Y nosotros vamos como primer candidato a concejal –se comprometieron los diecinueve intendentes que se encontraban ayer a la mañana en Lanús.

Las promesas que se escucharon en la carpa armada por el intendente Darío Díaz Pérez reflejaron el estado de ebullición que recorre por estos días al peronismo bonaerense. “Si el proyecto me necesita en otro lado, yo voy. Estamos plebiscitando”, aseguró Scioli. La reunión se convirtió entonces en un pacto de compromisos mutuos, lo que derivó en un clima de gravedad y épica que contagió a todos los presentes. El vicegobernador Alberto Balestrini, titular del Senado bonaerense, adelantó que en caso de ser necesario será candidato a diputado nacional por la lista del Frente para la Victoria. “Yo también voy”, remarcó. “Acá no hay destino individual”, fue uno de los latiguillos que circularon en la charla.

En la reunión estuvieron Scioli, Balestrini, el intendente Díaz Pérez y el presidente provisional del Senado, José Pampuro, hombre influyente en Lanús. Los intendentes en cuestión eran Darío Giustozzi (Almirante Brown), Baldomero Alvarez de Olivera (Avellaneda) y Julio Pereyra (Florencio Varela), entre otros. Quienes estaban presentes transmitieron la voluntad de los 19 intendentes de la tercera sección electoral (sur del conurbano) de presentarse como primer candidato a concejal en sus respectivos distritos. Aunque no estuvo en esa reunión, también el jefe de Gabinete, Sergio Massa, hizo pública su disposición de presentarse como primer candidato a concejal en Tigre. “Yo también podría encabezar la lista de concejales en Tigre”, dijo Massa. Intendente de licencia, Massa nunca ocultó su intención de regresar a la intendencia.

Pero los planes del jefe de Gabinete tienen un obstáculo. Muchos de sus compañeros del PJ bonaerense piensan solicitarle que el 28 de junio se presente como primer candidato a senador provincial por la primera sección electoral (norte y oeste del conurbano). El pedido a Massa, que se concretará en los próximos días, responde a la estrategia de poner en la cancha a los mejores hombres del oficialismo. El apellido de Massa podría sumar votos en una sección electoral con fuerte raigambre peronista pero que incluye localidades donde el kirchnerismo cosechará resistencias: sobre todo en el primer cordón de la zona norte, léase Vicente López y San Isidro. Además, la idea de ubicar a los nombres más conocidos del oficialismo en las distintas partes de la boleta del FPV también supone un desafío para los líderes locales: obligará a los dirigentes involucrados en la elección a comprometerse en serio con la lista oficialista.

Vista la evolución de los acontecimientos, la frase de Kirchner sobre una eventual candidatura de Scioli terminó siendo todo lo opuesto a una broma. La sorpresa conmovió al sistema político, desnudó una de las estrategias del oficialismo y permitió testear las primeras reacciones de la opinión pública. Pero la versión sobre la probable candidatura de Scioli no será la única con la que buscará sorprender el titular del Partido Justicialista. La próxima novedad tendrá como escenario el consejo directivo del PJ que preside Kirchner. En los próximos días, como parte de la campaña, el santacruceño anunciará drásticos cambios en la conducción partidaria. Los cambios que se vienen –desplazamientos y designaciones– fueron conversados con varios de los miembros del consejo directivo.

Con el apoyo de la mayoría de los consejeros, Kirchner pretende excluir de la conducción a quienes decidieron competir con el partido a través de otra fuerza política: será el caso de Felipe Solá, candidato a diputado por Unión-PRO. Pero también habrá novedades para Juan Carlos Romero, Carlos Reutemann e incluso para el ex jefe de Gabinete Alberto Fernández, quien ostenta el cargo de secretario general del partido. “A los que no acompañen este proyecto les vamos a pedir que renuncien”, dijo a Página/12 un dirigente bonaerense que tiene un alto cargo en el PJ nacional.