En el Gobierno existe confianza en que los cambios introducidos al proyecto de ley de Servicios de Comunicación Audiovisual dejarán satisfechos a los senadores que hasta ayer eran reacios o directamente estaban en desa-cuerdo con votar la propuesta del oficialismo. Los sondeos hechos por las principales autoridades del kirchnerismo en el Senado, José Pampuro y Miguel Angel Pichetto, arrojaron datos que en la Casa Rosada evaluaban anoche como alentadores.

Las modificaciones al proyecto original anunciadas por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner –cerrar a las telefónicas el ingreso a la televisión por cable– y el cambio en la integración del ente que será la autoridad de aplicación de ley sirvieron para darle más volumen al consenso en Diputados, pero estuvieron especialmente dirigidos a destrabar la situación en el Senado. El último recuento de la Casa Rosada arrojó entre 38 y 40 votos a favor del proyecto. Los operadores K también contaron unos pocos oficialistas y aliados que aún dudan qué hacer y que podrían resultar decisivos dado lo ajustada de la diferencia.

En el Gobierno creen que la exclusión de las telefónicas, la decisión de que la autoridad de aplicación sea un organismo descentralizado con mayor cantidad de miembros que en el proyecto inicial y de difícil remoción y la ampliación del cupo obligatorio para producciones locales independientes denota una apertura suficiente como para cerrar cualquier vía de escape, al menos para los propios o los aliados. Entre los senadores que aparecían con más dudas y que ahora en el Gobierno son contados entre los que apretarán el botón para votar a favor están los chubutenses Silvia Giusti y Marcelo Guinle, el jujeño y empresario de medios Guillermo Jenefes y Horacio Lores, del Movimiento Popular Neuquino.

Según las estimaciones de plazos que hacían anoche en la Rosada, el proyecto saldría con media sanción de la Cámara de Diputados entre hoy y mañana y el próximo lunes a más tardar estaría ingresando en el Senado. La semana que viene comenzaría a tratarse en las comisiones y antes los senadores seguramente escucharán las precisiones que necesiten de parte del interventor del Comfer, Gabriel Mariotto.

El tema de las comisiones no es menor, porque el plan del vicepresidente Julio Cobos es darles participación a una mayor cantidad de comisiones que las que intervinieron en Diputados. La semana próxima, sin embargo, va a tener que hacerse cargo del Poder Ejecutivo, porque la Presidenta viajará a Estados Unidos para participar de la cumbre del G-20 primero y de la Asamblea Anual de las Naciones Unidas después.

“Cobos quería que hubiera cuatro o cinco comisiones en el tema, para llevar a la larga el debate, y nosotros pretendemos que haya dos o a lo sumo tres como en Diputados, para tener un dictamen más rápido y que se vote”, comentó a Página/12 un funcionario del Gobierno. Ese objetivo será más fácil de lograr si es Pampuro quien maneja el Senado por esos días.

Cuando este diario preguntó si también especulaban, por el síndrome de la 125, con la presidencia de Pampuro para inclinar la balanza ante un eventual empate, la fuente lo negó. “Para nada, no va a haber empate.”