- La causa judicial sobre el asesinato de Mariano Ferreyra tiene siete detenidos que integraban una patota de la Unión Ferroviaria (UF) que atacó a los trabajadores tercerizados y militantes.

- Hay tres sospechosos de haber utilizado o llevado armas: el barrabrava de Defensa y Justicia Cristian “Harry” Favale, el ex barra de Racing Gabriel “Payaso” Sánchez y el trabajador ferroviario Guillermo Uño. El portero de los talleres de Remedios de Escalada, Juan Carlos Pérez, fue señalado como quien recogió las armas al final.

- Las pericias establecieron que se usaron por lo menos tres armas, dos calibre 38 y una 22. Hasta ahora se descarta que haya habido fuego cruzado, como intentaron instalar algunos de los imputados.

- Hasta ahora el único dirigente de la Unión Ferroviaria implicado es Pablo Díaz, quien participó de los hechos dando directivas en el lugar, según los testigos. Es uno de los presos. Pero la Justicia también investiga a otros dirigentes. Uno de ellos es Juan Carlos Fernández, tercero en la línea jerárquica debajo del titular del gremio, José Pedraza, quien tampoco escapa a la pesquisa. También están en la mira sindicalistas de Remedios de Escalada, donde se habría organizado el ataque.

- Una pista vinculada con el gremio es la que analiza si ese día los trabajadores tuvieron una especie de licencia especial, para justificar la ausencia.

- La jueza Wilma López definiría pronto una serie de procesamientos, que serían por el delito de homicidio calificado.

- La actuación de la Policía Federal está siendo investigada en un expediente separado, para determinar si hubo zona liberada o simple negligencia. Hay un peritaje clave en marcha sobre las comunicaciones policiales, algunas reveladas por Página/12.