Los seis mil efectivos de Gendarmería que se desplegarán en el conurbano bonaerense trabajarán “en puntos fijos de control” y “en operativos”, que se diagramarán en conjunto con la Policía Bonaerense. Así lo anunció Ricardo Casal, ministro de Seguridad y Justicia de la provincia. Por su parte, Nilda Garré, ministra de Seguridad de la Nación, anunció que los cuatro gendarmes que recibieron heridas de bala, en un predio cerca del Riachuelo, “están fuera de peligro”.

Casal y Garré se reunieron ayer para coordinar el denominado Operativo Centinela, anunciado el lunes por la presidenta Cristina Fernández, que contempla el envío de 6000 gendarmes al conurbano y una inversión de 150 millones de pesos para reforzar la seguridad.

Casal subrayó que la Gendarmería y la policía diagramarán los operativos “diariamente en una grilla en mesas de trabajo”. Explicó que “los gendarmes estarán en puntos fijos y también colaborarán en operativos; trabajarán en saturación de control urbano y, fundamentalmente, en prevención”. Casal agregó que la Gendarmería continuará además con el “seguimiento y monitoreo en las autopistas”. Por último, aseguró que “con la colaboración de la policía y Gendarmería se hará una lucha sin cuartel contra el narcotráfico”. El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, consideró que el “eje central es la lucha contra la droga, esas organizaciones criminales”.

La ministra Garré se refirió a los cuatro gendarmes heridos de bala durante un intento de ocupación en Villa Diamante, Lanús: “A uno de ellos, gracias al casco que llevaba, la bala no le penetró. Otros dos fueron heridos en las piernas y el cuarto recibió una herida más delicada en la ingle. Tres de ellos fueron internados en el Hospital Militar Central, y el cuarto en el Churruca. Todos están ya fuera de peligro”.

La funcionaria precisó que el ataque se produjo “en un predio donde Acumar (Autoridad de Cuenca Matanza-Riachuelo) instalará una planta de procesamiento de líquidos cloacales. Los gendarmes estaban de custodia, en cumplimiento de una orden del juez Luis Armella. La situación era tranquila, estable, hasta que el martes, inexplicablemente, los gendarmes fueron atacados a balazos”.