Aunque el resultado del escrutinio complementario en las provincias de Formosa, Chaco y San Juan favoreció largamente a Leopoldo Moreau, hasta última hora de ayer su contrincante, el senador porteño Rodolfo Terragno, no había reconocido el resultado que convirtió al diputado bonaerense en precandidato presidencial por la UCR.
Terragno no se privó de ocultar su malestar cuando a punto de embarcarse hacia Buenos Aires, en el aeropuerto de Formosa, respondió que “las elecciones válidas son las que se llevaron a cabo el pasado 15 de diciembre”. Ese día, fecha en la que se concretaron los primeros comicios internos del radicalismo, tanto Moreau como Terragno se proclamaron ganadores. Aunque el senador porteño había denunciado la existencia de fraude en Chaco y Formosa, no retiró su postulación y convalidó con su participación el triunfo que el domingo pasado consagró a Moreau como candidato presidencial.
“Me voy a mantener en silencio hasta después de las elecciones del 27 de abril”, fueron algunas de las pocas y últimas palabras que Terragno brindó a la prensa antes de comenzar su autoimpuesto ostracismo. Aunque el senador aseguró que “ése es el mayor aporte que puedo brindar al partido”, también prometió futuras publicaciones. “Fuera del marco electoral voy a contar toda la verdad en forma documentada y detallada”, arriesgó.