“No hay cosa más mentirosa que políticos en campaña”, dijo ayer el presidente Eduardo Duhalde en declaraciones radiales desde Pinamar y calificó de “un absurdo” las versiones sobre un supuesto pacto con Carlos Menem. También reiteró que hay una dirigencia “irresponsable y escatológica” en referencia a las denuncias de un posible fraude electoral en los comicios presidenciales del próximo domingo.
Desde Pinamar, a donde fue junto a su familia a pasar Semana Santa, Duhalde relativizó el ascenso electoral de Menem y de Ricardo López Murphy (a quienes relacionó “con el modelo económico que tiene que ver con los ajustes estructurales”) y afirmó que están bien ubicados en las encuestas debido a “la creatividad publicitaria de sus campañas”, que apuntan “a la desmemoria”. En su programa en Radio Nacional y en declaraciones a Radio Mitre, el Presidente señaló ayer que “habrá segunda vuelta el 18 de mayo” y que el 25 “sin ningún tipo de dilaciones” colocará la banda presidencial “al presidente o presidenta que elijan los argentinos”.
En su programa “Conversando con el presidente”, Duhalde pidió a los argentinos que en las elecciones “no den ni un paso atrás” porque “no reconocer que la Argentina está cambiando es peligroso” y agregó: “Estábamos en terapia intensiva y ahora estamos en intermedia, pero hay que tener mucho cuidado porque como un enfermo se puede volver a terapia intensiva y de ahí a la Chacarita”. Ante las consultas sobre un supuesto pacto con Menem poseleccionario, el Presidente afirmó: “Me voy del cargo, no tengo que negociar nada, me voy a mi casa y se acabó”
Respecto de las sospechas de fraude dijo que “son tácticas de campaña” y que es una “irresponsabilidad de la dirigencia” dudar de la transparencia de los comicios. “Hay una sola boleta y no habrá ninguna dificultad”, señaló y explicó que la empresa encargada del escrutinio “es la misma de las elecciones del ‘97, ‘99 y 2001”.
Por otra parte, Duhalde justificó la abstención de la Argentina en la condena de la ONU a Cuba y dijo que su intención “fue mantener la coherencia, junto a Brasil” con el rechazo anterior a la guerra en Irak.