El ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, se mostró a favor de analizar la eventual estatización del sector del juego en la provincia de Buenos Aires. El funcionario consideró que ése es un “debate político que se puede dar y es viable”. Lo hizo luego de que el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, resolviera extender por decreto las licencias de 14 de los 46 bingos y casinos a cambio de cobrar 600 millones de pesos este año. Las licencias se extendieron quince años, algo que generó discusiones en el bloque kirchnerista bonaerense.

Tras la decisión del gobernador, que buscó oxigenar en lo inmediato las arcas provinciales, surgió un debate en el kirchnerismo sobre cómo ampliar los márgenes de recaudación del Estado. El vicegobernador Gabriel Mariotto solicitó un proyecto que fue elaborado por el diputado provincial de la Coalición Cívica-ARI Walter Martello y por María Isabel Gainza.

El ex gobernador Felipe Solá, en tanto, cuestionó la decisión de Scioli: “Daniel le está renovando a los que vencen hasta el 2015. Y pagan el canon ahora. No va a tener cánones de los bingos en 2013 y 2014, porque ya los está cobrando ahora”, advirtió. “Está endeudando a la provincia con los 600 millones de la Anses”, señaló el diputado peronista.

“Hay que revisar la ecuación de ganancia de las empresas”, sostuvo el diputado Fernando “Chino” Navarro. Otra posibilidad que circuló era avanzar directamente con el control estatal del juego. En ese sentido, el diputado bonaerense Mario Caputo –ex colaborador de Randazzo– presentó un proyecto que apunta a la estatización.

Sobre la discusión de una posible estatización del juego, Randazzo afirmó ayer: “No tengo opinión. Pero no me parece descabellado que se pueda discutir ese tipo de cuestiones”. “No creo que esté mal que se ponga sobre la mesa la discusión sobre si la explotación del juego debe estar en manos de privados o del Estado”, advirtió el ministro del Interior y Transporte. “Es un debate político que se puede dar, es viable”, completó.