Oscar Moscariello es el vicepresidente primero de Boca y siempre participó en política. Milita en el Partido Demócrata Progresista, la fuerza que impulsó la candidatura presidencial del dictador Pedro Aramburu en 1963 y que en 1973 integró la Alianza Popular Federalista encabezada por Francisco Manrique. Hoy el PDP es una pata de la alianza Unión PRO.

Moscariello es también legislador porteño. Conoce desde el año 2000 a José Francisco Palmiotti (es padrino de confirmación de su hijo menor, Pablo). En aquel momento, el actual defensor adjunto del Pueblo era diputado. Moscariello también está al tanto, por ser un alto dirigente del club, de cómo se opera con la venta de entradas para los partidos.

–¿Qué nos puede decir de este tema?

–En Boca sólo se comercializan 4.500 entradas para socios adherentes a través de Pago Fácil y se eliminaron las demás bocas de expendio. También se consiguen localidades cuando hay adicionales de partidos por la Copa.

–¿Puede ser que se comercialicen ilegalmente las entradas de protocolo?

–Si son plateas, puede ser. En Boca, yo como vicepresidente, dispongo de diez entradas como esas. Pero tengo la obligación de informar con nombre y apellido y número de documento a quién se las entrego. Las entradas de protocolo las recibimos los miembros de la comisión directiva y, además, las agrupaciones políticas y peñas del interior.

–¿Cuántas personas acceden a ellas en Boca?

–Las reciben entre 1700 y 2000.

–¿Qué hará el club si se comprueban las irregularidades por reventa de entradas oficiales o la comercialización de protocolos?

–En este último caso identificaremos fácilmente a los responsables, porque las de protocolo son distribuidas por el secretario general del club, que tiene el detalle de cada una.