Vie 30.05.2014

EL PAíS • SUBNOTA  › EL MONTO, LOS PLAZOS, CONDICIONES Y BENEFICIOS

Esta vez, sin restricciones

Argentina cancelará la deuda acumulada por 9700 millones de dólares con el Club de París en un plazo de cinco años. Los pagos serán en efectivo y financiados en cuotas anuales con una tasa de interés del 3 por ciento. Las negociaciones terminaron definiendo una elaborada estructura financiera donde los desembolsos variarán cada año. El acuerdo estipula un pago mínimo cada año que oscila entre 1000 y 1600 millones de dólares según el peso de los vencimientos de deuda externa que debe hacer frente el país. Esa cifra deberá ser cubierta para no volver a caer en default. La fórmula acordada habilita pagos adicionales hasta un total aproximado de 2250 millones de dólares anuales siempre y cuando se realicen más proyectos productivos. Si durante el plazo de 5 años las IED adicionales son insuficientes para impulsar mayores pagos argentinos que permitan cubrir la totalidad de la deuda, el país puede posponer los vencimientos hasta 24 meses más, totalizando un plazo de siete años. La extensión de los plazos hasta 2021 incrementará el costo financiero en alrededor de un 1 por ciento a lo largo de todo el período, elevando la tasa total hasta 3,8 por ciento.

El mecanismo definido establece un desembolso inicial de 1150 millones de dólares dividido en dos partes: 650 millones en julio y 500 millones en mayo de 2015. Los pagos se harán con reservas del Banco Central. Concretar esa parte del acuerdo, informó el Club de París, levantará las restricciones que tienen agencias de desarrollo, bancos y aseguradoras de los miembros del foro para financiar inversiones productivas y otorgar líneas de crédito a empresas de esos países que operan en Argentina.

La transferencia siguiente se hará en mayo de 2016. Para garantizar la sustentabilidad, el acuerdo prevé menores esfuerzos de divisas en 2015 y 2017, dos años con importantes vencimientos de deuda. Según pudo saber este diario, en 2017 la carga mínima obligatoria se reduce a 1000 millones de dólares mientras que al año siguiente el piso asciende hasta aproximadamente 1600 millones. “Argentina cierra un capítulo más de la triste historia del sobreendeudamiento que condujo al default. El esquema de pagos acordado reduce sensiblemente el costo financiero de esta deuda impaga. El acuerdo asumido garantiza la sustentabilidad del pago de los compromisos financieros y no implica condicionalidad alguna para llevar adelante políticas económicas”, expresó el Ministerio de Economía a través de un comunicado.

- La deuda a pagar: El monto consolidado del pasivo asciende a 9700 millones de dólares al 30 de abril de 2014. La deuda en default contabilizaba aproximadamente 6000 millones de dólares. A esa cifra se le sumaron intereses y punitorios con una tasa promedio del 7 por ciento (los acreedores pretendían que sea 12 por ciento). Como toda deuda que se financia, las cuotas anuales pagarán una tasa de interés del 3 por ciento sobre el saldo de la deuda. A su vez, como contraparte del esquema de incentivos para que los acreedores promuevan inversiones en el país, Argentina abonará un cargo financiero cada año para que los pagos no alcancen el objetivo de máxima.

- Sin el FMI: A pesar de ser un grupo informal y negociar “caso por caso”, históricamente el Club de París ha elegido reestructurar deudas de países en default que acuden con un programa de rescate firmado por el FMI. La misión del Fondo siempre ha sido la misma: garantizar, mediante sus políticas de ajuste, el repago de la deuda acordada con el Club. El acuerdo con el Club de París no implica intervención alguna por parte del organismo y, por lo tanto, no impone ningún condicionamiento a la política económica. “Esta es una de las pocas veces, así nos dijeron los representantes del Club de París, que ellos negocian sin el FMI de por medio. La otra vez fue con Indonesia tras el tsunami en ese país”, relató el funcionario. “El Club de París en general funciona en tándem con el Fondo Monetario Internacional, Argentina lo vivió durante décadas y luego estas negociaciones condicionan a los países, a quienes les dictan las medidas económicas que tienen que tomar. Aquí no hay condicionamiento para nuestra política económica”, explicó Kicillof.

La ausencia del FMI no es irrelevante. La liberalización del comercio exterior que condicionó el acuerdo con el Club de París de 1956 o el plan de estabilización acordado con el FMI en el acuerdo de 1958 son dos ejemplos claros de las implicancias macroeconómicas y regresivas de esos viejos acuerdos. “Una vez más Argentina hace historia en materia de renegociación de deuda, puesto que es la primera vez que un país de ingresos medios logra acordar la cancelación de su deuda con el Club en un plazo de 5 años, extendible hasta los 7 años, y con una tasa de interés del 3 por ciento”, expresaron desde el equipo económico.

- Beneficios potenciales: Cuando concrete la totalidad del primer pago de 1150 millones de dólares (en dos veces), Argentina no experimentará más las restricciones que actualmente existen hacia las agencias de crédito a la exportación de los miembros del Club para las inversiones extranjeras que recibe el país. Adicionalmente, facilitará el acceso a los mercados internacionales de crédito. El ministro Kicillof aseguró que Argentina no se endeudará en el corto plazo, pero el acuerdo mejorará las condiciones de acceso al mercado financiero para financiar proyectos de infraestructura.

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