“Necesitábamos presionar, pero no me cabe ninguna duda de que Repsol va a aportar la producción que precisamos”, afirmó ayer Néstor Kirchner, en un gesto conciliador hacia la empresa a la que hace una semana denunció, junto a otras, de querer “extorsionar” al Gobierno, tapando los pozos de gas para conseguir una suba de tarifas, lo que, en definitiva, se produjo.
“En algunos casos, presionar está bien”, agregó el Presidente, en una conferencia de prensa que ofreció a medios españoles. En esos términos explicó sus acusaciones de la semana pasada. Kirchner también se refirió a la crisis energética en otro momento. Fue al dar un discurso en un acto en la localidad de Ensenada. Allí advirtió que “el pueblo argentino no va a pagar lo que no hicieron” las petroleras, en referencia a la falta de inversiones, causa principal para el Gobierno de los faltantes de energía.