Apenas dos días después del décimo aniversario del atentado contra la AMIA, una amenaza de bomba en un templo judío alteró el ritmo normal del mediodía en el barrio porteño de Balvanera. Un llamado telefónico anónimo alertó sobre la supuesta presencia de un artefacto explosivo en la sinagoga ubicada en Lavalle al 2400, a pocas cuadras de la sede de la mutual judía. Pero luego de un operativo de más de dos horas la Brigada de Explosivos de la Policía Federal determinó que se trataba de una falsa alarma. La investigación del hecho quedó en manos del Juzgado Federal 10, que está interinamente a cargo del juez Jorge Urso.
Según informaron fuentes policiales, un vecino de la zona denunció la amenaza y el personal de la Comisaría 7ª dispuso inmediatamente la evacuación del templo religioso de Lavalle 2449. Se dispuso además el desalojo de los locales comerciales de la cuadra, y se interrumpió el tránsito para permitir el trabajo de la División de Explosivos. En un operativo que duró más de dos horas, la brigada policial inspeccionó junto a una cuadrilla de perros las dos plantas y los dos subsuelos que tiene la sinagoga, donde no se registró la presencia de ningún material explosivo. Del mismo modo, se realizó un rastrillaje en dos playas de estacionamiento linderas al templo y otra ubicada sobre la mano de enfrente, y en los locales comerciales de la cuadra, todos con resultados negativos.