Aunque la política suele esquivar las vallas legales, la elección bonaerense presenta varias hipótesis para canalizar las fuerzas que entran a esa batalla: el Gobierno, a través de la candidatura de Cristina Fernández de Kirchner, el duhaldismo, con el aparato bonaerense, el gobernador Solá y su corriente e incluso los sectores kirchneristas no-peronistas, que seguramente querrán votar a Cristina pero no al PJ.
Variante uno. El Presidente, con la candidatura de su esposa como ariete, se sienta a negociar con las mejores cartas. En ese marco, el duhaldismo termina aceptando una lista de senadores y diputados con preminencia kirchnerista, pero también con presencia de duhaldistas potables para la Casa Rosada y hombres de Solá. En la lista para la Legislatura bonaerense habría preeminencia duhaldista. Muy probable.
Variante dos. No prospera la negociación con Duhalde y en la provincia hay dos listas. Fuera del PJ se presentaría el kirchnerista Frente por la Victoria, con Cristina como senadora, y una lista de diputados y legisladores integrada por felipistas y kirchneristas. Chiche Duhalde sería la número uno en la nómina del PJ, sólo duhaldista. Las encuestas sostienen que ganaría Cristina y que Chiche obtendría la tercera banca.
Variante tres. Esta alternativa tiene problemas legales, pero es barajada por hombres de Solá. Habría una única lista de senadores y de diputados nacionales, consensuadas entre la Rosada, Duhalde y Solá. El terreno de confrontación serían las listas de legisladores bonaerenses. Los seguidores del gobernador aseguran que si las boletas de senadores y diputados están a nombre de una alianza nacional, por ejemplo el Frente de la Victoria, bastará una autorización de ese frente para que haya dos boletas. Según jueces electorales consultados, eso sólo se podría hacer con autorización del PJ bonaerense, manejado por el duhaldismo, que difícilmente le daría su visto bueno a felipistas y transversales.
Variante cuatro. Cristina y la lista consensuada de diputados van arriba en la boleta y debajo los legisladores del PJ duhaldista. La gente de Solá y los transversales tendrían que llamar al corte de boleta. Esta variante le otorgaría gran ventaja al duhaldismo. Es improbable.