–¿Qué cambios haría en el sistema judicial?
–Hay muchas leyes que modificaría, pero es una tarea del Congreso.
–¿Podría dar algún ejemplo?
–Pienso en muchas cosas, una es el Código Penal. No se debe arreglar con parches, como viene ocurriendo. La reforma tiene que ser completa. El Código Penal es un sistema.
–¿Se refiere, por ejemplo, al endurecimiento de ciertas penas derivado de los reclamos de Juan Carlos Blumberg? ¿Cuáles son los riesgos de esa situación?
–En cualquier momento cometer un robo con la exhibición de un arma va a ser más grave que matar a alguien. La mayoría de las penas que se han endurecido tienen que ver con los delitos contra la propiedad. Entonces resulta que el derecho de propiedad es más importante que el derecho a la vida. Pero, me pregunto, si no tenés vida ¿para qué diablos querés la propiedad? Es una cuestión de escala de valores. Hay que ver qué escala de valores tiene una sociedad determinada, en un momento determinado porque eso va a influir en la forma en que se dictan las leyes. Indudablemente hay que modificar muchas cosas. Para hacerlo de golpe hace falta mucha plata y no hay.
–¿Qué es lo que requiere dinero?
–Un ejemplo: es imposible trabajar con tres juzgados de ejecución penal nada más y están en oficinitas donde los expedientes se les caen por la cabeza. Falta personal, falta informatización. Son tres personas, dos de ellas jueces subrogantes. Es decir, son jueces interinos a los que se les exige una tarea ciclópea sin tener el cargo. Y esto es sólo un detalle. Hay siete juzgados correccionales vacantes. Nunca se termina de nombrar a los jueces. A la vez, que haya tantos subrogantes trae problemas añadidos: mucha gente está cuestionando su actuación por ser jueces sin acuerdo.
–¿Por qué falla el sistema de nombramientos?
–Unos dicen que el Consejo de la Magistratura es lento, otros dicen que las ternas se duermen en el Ministerio de Justicia, otros que se duermen en la Secretaría Legal y Técnica de la Presidencia, o en el Senado. Acá siempre jugamos al gran bonete. Hay que terminar con las culpas y buscar un sistema que agilice. Es imposible que un juzgado trabaje sin juez. Y eso que yo sólo estoy hablando de la Justicia penal que es la que conozco, pero entiendo que hay problemas en todos los fueros.