Con cierto tono de amante despechado, el líder de PRO, Mauricio Macri, se refirió ayer a la fuga al kirchnerismo del tercero en su lista de diputados en las elecciones de octubre, Eduardo Lorenzo Borocotó. “En lo personal, no puedo ocultar que me dolió mucho la partida de Borocotó. Creí que teníamos una escala de valores común y que la palabra era importante”, se quejó Macri. “Semejante estafa a la ciudadanía porteña es gravísima. Pesará sobre su conciencia. Si ha habido una compra, tiene que haber habido un comprador”, disparó en dirección al gobierno nacional. “No hablé con Borocotó. La partida de un diputado no va a detener nuestro proyecto de renovación de la política porteña”, consideró Macri.