“La Argentina seguirá avanzando en la preparación de la defensa de sus derechos ante el Tribunal de La Haya, para lo cual la habilita el estatuto del río Uruguay”, ratificó ayer el canciller Jorge Taiana, quien lamentó además “la intransigencia de la empresa Botnia”. El titular del Ministerio de Relaciones Exteriores afirmó que fue esa firma finlandesa la que impidió el acuerdo entre la Argentina y Uruguay, porque con su actitud “hizo fracasar la reunión de los presidentes” Néstor Kirchner y Tabaré Vázquez que debía celebrarse en la localidad uruguaya de Anchorena. Recordó en ese sentido que, en su comunicado del 26 de marzo, Botnia informó que con “el propósito de contribuir a abrir un espacio de diálogo” entre ambos países y haciéndose eco de la exhortación hecha por ambos mandatarios suspendería “durante un período máximo de 90 días los trabajos de instalación de la planta”. “El cambio de actitud posterior no resulta coherente con el declamado propósito de contribuir al diálogo entre los dos países”, evaluó el canciller.