Ruben describe las complicaciones que le traen tantas reuniones con abogados y jueces, que le impiden cumplir con su trabajo. Pero en estos meses se hizo tiempo para reunirse con HIJOS La Plata, e incluso aceptó participar del documental Un claro día de justicia, de Ingrid Jashek y Ana Cacopardo.

–¿Tienen un acercamiento con los organismos de derechos humanos?

–(Ruben) Estuve en comunicación con la gente de HIJOS de La Plata, hemos charlado en alguna reunión. Fui a conocerlos, a tomar unos mates porque habían venido acá y no pudimos atenderlos bien. Todas las organizaciones están apoyando a la familia, por ahí nosotros no somos de estar participando.

–¿Tu contacto fue para agradecer?

–Sí, y para conocerlos, para saber el porqué de lo que hacen. Muchos de los chicos que están ahí tienen sus padres desaparecidos, y es como si les estuviera pasando a ellos otra vez. Afectivamente uno está compenetrado con ellos. (Irene) No vamos a las marchas... Si fuéramos a una tendríamos que ir a todas... hay tantos grupos...