La protesta contra las pasteras empieza a expandirse y a hacerse sentir en todo Entre Ríos. Ayer los asambleístas entrerrianos lograron cortar en forma conjunta los tres puentes internacionales con Uruguay en medio del recambio turístico. En Colón, el corte de la Ruta 135 seguía a la medianoche en medio de una asamblea en la que había “consenso” para continuar con la medida, aunque discutían la posibilidad de alternar cortes programados de seis horas con otros “por tiempo indeterminado”. En tanto los ambientalistas de Gualeguaychú siguen con el bloqueo ininterrumpido del camino a Fray Bentos que mantienen desde hace más de dos meses, mientras que en Concordia el paso a Salto estuvo cortado por seis horas y se levantó recién a las diez de la noche.

En el campamento que los ambientalistas de Gualeguaychú montaron en el cruce de Arroyo Verde y la Ruta 136, nadie discute la continuidad del bloqueo del paso internacional a Fray Bentos, que ya lleva diez semanas consecutivas. Todo el debate pasa por las distintas modalidades a adoptar en su reclamo contra la instalación de las pasteras sobre la margen oriental del río Uruguay y cómo extender la protesta más allá de esa ciudad entrerriana. Ayer, festejaron el corte simultáneo de los tres pasos fronterizos que unen a Entre Ríos con Uruguay.

Aunque tuvieron que volver a lidiar con no pocos turistas que intentaron pasar por allí en pleno recambio de quienes veranean en las playas uruguayas. Pero los asambleístas de Gualeguaychú lograron disuadirlos y los automovilistas emprendieron el regreso por el mismo camino que recorrieron hasta llegar al corte y en busca de otro cruce sobre los puentes que aún no estaban bloqueados.

Los cortes en Colón y Concordia comenzaron a las cuatro de la tarde con distintas modalidades. El bloqueo de la Ruta 135, que une Colón con Paysandú, comenzó con la intención de los asambleístas de mantenerlo “por tiempo indeterminado”. Hasta ahora la Asamblea Ambiental Ruta 135, realizaba cortes programados durante seis y siete horas diarias, pero la incorporación de los otros cinco nucleamientos en los que están divididos los asambleístas de la ciudad, más vecinos de Villa Elisa y Concepción del Uruguay, sumaron fuerzas para sostener la medida.

En una nueva asamblea, que se realizaba al cierre de esta edición, los asambleístas parecían dispuestos a no ceder en el corte. La discusión sobre casi la medianoche, era sobre casos puntuales de personas que pedían que les abrieran paso para atravesar la frontera. “El corte no está en discusión”, sostuvo ante este diario Poli Echeverría, miembro de la Asamblea que retomó los cortes programados en el paso limítrofe.

El debate sobre la Ruta 135 era la modalidad con la que mantendrían los cortes y la fuerza para llevarlos a cabo. “Hay consenso para seguir, todo depende de nosotros”, afirmaron los asambleístas a Página/12. La idea generalizada entre los asambleístas –que están divididos en distintas organizaciones– era mantener la unidad en la protesta e intercalar los cortes programados de seis horas y dejar abierta la posibilidad de prolongarlos por “tiempo indeterminado” cuando exista el apoyo suficiente para garantizar el bloqueo.

En Concordia, el corte tenía previsto una duración de seis horas: desde las cuatro de la tarde a las diez de la noche. Pero esta vez, los asambleístas que respaldan el corte no tuvieron que toparse con los militantes del PJ entrerriano que se oponían al bloqueo. “Es un hecho histórico para la ciudad”, dijo a Página/12 Roberto Cabrera, un dirigente docente y de la filial local de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) que tuvo que enfrentar dos veces y en plena ruta a los militantes alineados con el gobernador Jorge Busti.

La primera vez lograron impedir el bloqueo en medio de forcejeos y la segunda, tras algunas discusiones, terminaron por acompañar la caminata sobre la ruta para impedir que se corten las dos manos del camino. Esta vez, el propio intendente Jorge Cresto, un peronista enfrentado a Busti, reconoció que “hay una decisión tomada, gente liderando esta protesta y ha decidido cortar seis horas”, a pesar de que el jefe comunal volvió a mostrarse en contra de la interrupción del tránsito de la Ruta 015.

Pero ayer el paso al puente que cruza la represa de Salto Grande hasta la ciudad uruguaya de Salto estuvo totalmente interrumpido por seis horas. Unos 500 asambleístas completaron el corte sin roces ni enfrentamientos. “Ahora habrá que ver cómo la gente se sigue sumando y participando para ver cómo podemos seguir en Concordia esta lucha contra las pasteras”, afirmó Cabrera. Hoy por la noche los asambleístas volverá a reunirse en la plaza de la Sociedad Rural de esa ciudad, para resolver si vuelven a bloquear el paso a Uruguay el próximo sábado o si adoptan otro tipo de modalidad para protestar contra las plantas de pasta de celulosa.