EL PAíS • SUBNOTA
El gobernador de Mendoza y vicepresidente electo, Julio Cobos, habla de la derrota en su provincia, del futuro de la Concertación Plural y de su partido. También esquiva las comparaciones con el vicepresidente saliente: “Cobos no es Scioli”, define.
› Por Eduardo Tagliaferro
desde Mendoza
La alegría no pudo ser completa para Julio Cobos. La Concertación Plural, ese proyecto que reunió a varios gobernadores radicales con el kirchnerismo, lo llevó hasta la vicepresidencia. El día que llegaba a ocupar el mayor cargo electivo de su carrera, la Concertación fue derrotada por el Partido Justicialista en la misma tierra en la que había nacido: Mendoza. El principal referente de los radicales K no duda en asumirse como el padre de la derrota de la provincia que gobierna. Apenas llegó de Buenos Aires, donde participó de los festejos de la fórmula ganadora, enfrentó a la prensa para desmentir que la Concertación esté herida de muerte. “No es el fin de la Concertación, es el comienzo”, responde. Se niega a los paralelismos con el vicepresidente Daniel Scioli. “Cobos no es Scioli”, dice cuando se le recuerda que llega debilitado a la vicepresidencia. Además, hace un llamado a los miembros de su partido: “Apostamos a la reconstrucción del radicalismo” porque “nuestro país necesita un radicalismo fuerte”.
–¿La derrota de su candidato en Mendoza a manos del PJ es el fin de la Concertación?
–No. Esto es un comienzo. La Concertación está en marcha en todo el país. Obviamente son procesos nuevos que requieren madurez, un tiempo de decantación y nosotros seguiremos trabajando en ese sentido. La Concertación es sumar gente de otro color político. La Concertación es lograr acuerdos y tener estrategias a largo plazo. No se trata solamente de una elección.
–El peronismo tiene clara mayoría en el Congreso nacional, triunfó en casi todas las provincias en las que se eligió gobernador. El Presidente dijo que se pensaba dedicar a la reorganización del PJ. ¿En qué fuerza se piensa apoyar para impulsar la Concertación?
–Las fuerzas son el trabajo, la perseverancia, la prudencia. He gobernado esta provincia en muchos momentos en gran soledad. En mi vida las he pasado todas. Un tropezón no es caída.
–Su ministro de Seguridad, Alfredo Cornejo, dijo que el Presidente Kirchner los traicionó por haber apoyado al candidato del PJ. ¿Coincide con la opinión?
–Son momentos en los que las pulsaciones están muy altas y uno se expresa al fragor de la lucha. Eran las reglas del juego.
–Llega debilitado a la vicepresidencia. ¿Su margen político se asemejará al de Daniel Scioli?
–Yo no sé si debilitado. Tengo el apoyo de toda la ciudadanía de Mendoza. Además, si el poco poder de Scioli es el que le permitió ganar como ganó en Buenos Aires, no entiendo que es poco poder. El poder lo da la relación con la gente. A Scioli lo han menoscabado, pero es un hombre leal. Yo destaco su labor.
–¿Se imagina con el perfil de Scioli?
–Cobos no es Scioli. Yo no ando en lancha, yo corro. El haber ocupado cargos en el Ejecutivo me ayudará a manejarme en el Legislativo.
–¿Sigue vigente el proyecto de los radicales K? ¿Quién será su referente?
–Vamos a hablar con los gobernadores. Nosotros apostaremos a la recuperación del radicalismo. Más allá del caso de Mendoza, en el que no tenemos el mejor escenario, nosotros tenemos la convicción firme de que nuestro país necesita un radicalismo fuerte, necesita una discusión, que ellos se levanten también. El radicalismo tiene que hacer su autocrítica. De ahí en más, entre todos, sacar adelante este partido. Si los radicales no hubieran concurrido divididos a esta elección, si no se hubiera actuado con mezquindad, ya que no pueden negar que el candidato César Biffi es radical, hubiéramos ganado.
–¿Está hablando de una reunificación con la estructura institucional del radicalismo?
–Cuando asumí tuve que gobernar. No elegí armar una estructura política, me vi obligado a ello. Desde el odio, desde el rencor no se construye nada positivo.
–Roberto Iglesias y Ernesto Sanz dijeron que no se alegraban por el triunfo de Celso Jaque. ¿Lo llamaron?
–¿A mí?
–Recién dijo que pensaba reorganizar el radicalismo.
–Cada uno tendrá que hacer su autocrítica. Quizá varios tendrían que dar un paso al costado.
–¿Se siente el padre de la derrota mendocina?
–Me siento responsable, porque cuando uno no obtiene lo que desea, eso no se llama éxito. Se llama fracaso.
–¿Por qué perdió la Concertación en Mendoza?
–Quizá no supimos transmitir con claridad lo que representaba este espacio político. Creíamos que un conjunto de hombres y mujeres de distinta pertenencia política en Mendoza, pero con objetivos comunes, podía ser avalado por la ciudadanía. Quizá sean ésas las razones. A lo mejor el senador Jaque ha expresado un sincero acercamiento de sus propuestas hacia la gente. Ahora está en él no decepcionar a la gente con las propuestas que ha realizado.
–¿Los mendocinos no se confundieron porque dos fuerzas políticas que se enfrentaban en la provincia, como el PJ y la Concertación apoyaran la misma fórmula presidencial?
–Estaban claras las reglas de juego. En alguna oportunidad se habló de que las dos listas fueran juntas. Opiné que gran parte del justicialismo no estaba muy consustanciado con el proyecto común, y nosotros tampoco. Pensamos que una parte del PJ sí era la que aceptaba nuestro estilo, nuestra forma, nuestras propuestas. Pero el pueblo de Mendoza no lo vio así. Quizá me equivoqué en el armado. Hay que reconocerlo. Nosotros nunca hemos ocultado ni disimulado nada. Nos hicimos cargo en los momentos duros. Dios dirá qué pasa de aquí en adelante.
El presidente de la Unión Cívica Radical (UCR) y ex candidato a vicepresidente en la fórmula de UNA con Roberto Lavagna, Gerardo Morales, evaluó ayer que el desempeño de su partido en la elección “fue muy bueno, pese a que esperábamos acceder al ballottage y obtener un triunfo, pero los 17 puntos logrados son muy importantes”. Destacó también que obtuvieron doce diputados: tres de Córdoba, dos de Buenos Aires y uno de Jujuy, Capital Federal, La Plata, Buenos Aires, Tucumán, Entre Ríos, Corrientes y Chaco, “y ojo que son radicales de paladar negro, no hay ninguno de los infieles”, agregó en referencia a los llamados radicales K que encabeza el mendocino Julio Cobos que participan de la Concertación Plural que impulsa el kirchnerismo. Sobre el vicepresidente electo dijo que “no hay vuelta de hoja, Cobos está echado (del radicalismo)” y agregó a modo de anuncio que “el partido debe ser intransigente, hoy más que nunca. No vamos a permitir que el radicalismo adopte acciones dispuestas por Kirchner a través de los gobernadores K”.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux