“Pasaremos la noche aquí a ver si levantan el bloqueo de la frontera.” La frase no es de un turista desprevenido de fin de semana sino de uno de los asambleístas entrerrianos varados en Concordia, cuando pretendían llevar la protesta contra Botnia a territorio uruguayo. Decenas de ambientalistas permanecían anoche en la cabecera de los puentes internacionales de Colón y Concordia para cumplir con su objetivo. “Si el gobierno uruguayo no habilita los puentes, vamos a insistir por agua o atravesaremos la frontera desde Brasil”, dijo a Página/12 el asambleísta Jorge Fritzler.

Poco después del mediodía de ayer, la frontera uruguaya cerró Migraciones y clausuró todo paso por el puente internacional Concordia-Salto. Del lado argentino quedaron varados los asambleístas entrerrianos que habían anunciado que llevarían su protesta contra Botnia al balneario uruguayo de Las Cañas. La medida se extendió a las barcazas que cada hora y media hacen la travesía fronteriza por el río Uruguay. Ese era el único paso abierto hasta ayer, después que Uruguay decidiera cerrar los puentes San Martín (Gualeguaychú) hace unas semanas y Artigas (Colón) el sábado por la tarde.

Bajo la vigilancia de la Gendarmería, los ambientalistas decidían sus futuros pasos. En Concordia y Salto decidieron acampar para pasar la noche a la espera que desde Uruguay se rehabiliten los pasos. Los asambleístas no están dispuestos a bajar los brazos: “Si no los abren, cruzaremos por agua o por Brasil”, insistía Fritzler. Aunque las noticias que recibían desde el lado uruguayo tampoco eran alentadoras. “El gobierno uruguayo ordenó cortar la ruta que va desde Fray Bentos hasta Paysandú e hicieron un doble vallado sobre Botnia”, relataban otros asambleístas que buscaban información de lo que pasaba del otro lado del río.

Anoche, una larga fila de vehículos aguardaba sobre la Ruta 015, en la cabecera argentina del puente internacional, a que el paso a Salto fuera habilitado para poder cruzar hacia Uruguay. En tanto, los asambleístas organizaban la logística (comida y agua) para la tediosa espera. En la conversación comenzaron a surgir las formas de burlar los cierres dispuestos por el gobierno uruguayo. Todas se expresarán en las mociones que la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú discutirá el próximo martes, cuando proclame sus nuevas acciones contra las pasteras.