“Esa es una chicana frente a la marcha del otro día”, declaró ayer Aníbal Ibarra acerca del registro creado por el presidente Eduardo Duhalde para que los políticos que quieran renunciar a postularse a un cargo electivo en el 2003 puedan anotarse. Ibarra, quien está en carrera por su reelección, aclaró que no piensa inscribirse y reiteró su acuerdo “con un proceso de caducidad de los mandatos para producir una renovación general” de la política, pero consideró que “si este proceso no se da, es la gente la que tiene que decidir quiénes se van y quiénes se quedan” mediante elecciones.