Ante la falta de certezas sobre el futuro laboral, la creatividad a veces sirve como arma de protesta. Y qué mejor lugar para que aflore que el Centro Cultural San Martín. Ayer, para seguir la tradición de los 29, los empleados se reunieron en el hall de entrada e hicieron una olla gigantesca de ñoquis, en reclamo por los 2400 despidos del gobierno de Mauricio Macri. En concreto, denunciaron que diez reincorporados que trabajan en el Centro Cultural cumplían “tareas operativas necesarias” y no se les va a pagar su sueldo, pese a las medidas judiciales de no innovar que el gobierno PRO prometió acatar. Desde el Ministerio de Cultura, deslindaron responsabilidades hacia quien –dijeron– conduce la negociación de los contratados con Sutecba: el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta.

Los ingredientes de la protesta fueron cuarenta kilos de pasta, queso rallado, una pizca de imaginación y un cartel que advertía a quien pasaba que “los únicos ñoquis son los que están adentro de la olla”. Aunque estaban un poco pasados (Página/12 lo comprobó), los ñoquis cumplían con el objetivo de satirizar el argumento macrista para los despidos.

Mientras repartían volantes, el delegado de Sutecba, Jorge de Martini, remarcaba que los diez despedidos regresaron a sus lugares de trabajo por las dos medidas cautelares que dictaron los jueces Elena Liberatori y Roberto Andrés Gallardo. Sin embargo –denunció– “no fueron cargados en el sistema informático y no podrán cobrar sus sueldos”.

Son diez trabajadores que estaban bajo el régimen de planta transitoria que se conocía como decreto 959 y cuyos contratos no fueron renovados a fines del año pasado, junto con los de otros 2400 trabajadores. El delegado de Sutecba remarcó que las diez personas “ocupan puestos operativos y tienen una tarea necesaria que cumplir”, pero que desde que regresaron al centro cultural firman su ingreso “en planilla aparte, y no fueron cargados en Recursos Humanos”.

De Martini reclamó la intervención del ministro de Cultura, Hernán Lombardi, para resolver el conflicto y destacó que “seguirán las movilizaciones hasta que se incorpore plenamente a los cesanteados”.

Desde el Ministerio de Cultura advirtieron que “estas diez personas fueron contratadas en 2007”. “Hubo un acuerdo entre Sutecba y el gobierno para rever la situación de los 2400. Ojo, rever no significa modificar. Ningún ministro participa de esa negociación: es entre el gremio y la Jefatura de Gabinete”, explicaron.