Por Rocío García
Desde Madrid

“Esa calidez que he encontrado en España me ha puesto la mano en la espalda para venir a intentar esta locura artística a Madrid.” Ricardo Darín reconoció que de no haber contado con ese momento propicio que vive en España, tras el éxito cinematográfico de películas como Nueve Reinas y El hijo de la novia, no se hubiera atrevido a estrenar en un teatro madrileño la obra Art, que, junto a Oscar Martínez y Germán Palacios, ha representado durante los últimos cinco años en los teatros argentinos. “Nuestra versión puede aportar una lectura sutilmente diferente, variaciones sutiles de enfoque”, aseguró Darín. Art acaba de estrenarse en el teatro Infanta Isabel, de Madrid.
Sentados en el suelo del escenario del teatro, con los pies colgando por fuera, los tres intérpretes argentinos confesaron sus miedos pero también sus ansias por enfrentarse por primera vez al público español con la representación de Art, la obra de teatro escrita por Yasmina Reza, y que en España estrenó a fines de 1998 Josep María Flotats con el título de Arte. Ellos llevan cinco años representando Art en los escenarios argentinos, con más de 1100 representaciones y más de un millón de espectadores. “El desafío es apasionante. Estamos ansiosos. Cada público tiene sus códigos, pero confiamos en que las diferencias sean fácilmente salvables. Confiamos en llegar al corazón del espectador”, aseguró Martínez. “Sabemos de la versión española y esto coloca el nivel muy alto, pero de eso precisamente se nutre la aventura artística, que no se apoya en la tranquilidad sino en el desafío. Somos muy respetuosos de lo que se ha hecho aquí. Personalmente es una pena no haber visto la versión española, pero artísticamente creo que es bueno no tener referencias concretas. La química entre el espectador y la escena es un enigma que se irá desvelando día a día”, afirmó Darín. En principio, Art estará en cartel tres semanas, un plazo “cauteloso”, que se podrá prorrogar dependiendo de cómo funcione. “Disponemos de más tiempo”, añadió esperanzado el actor.
El actor de El hijo de la novia, Nueve reinas o la más reciente Kamchatka, que vive momentos de gloria en la cartelera española, se ha convertido en poco tiempo en un actor muy popular en España. Inclusive ya lo paran por la calle. “Tengo que reconocerlo. Si hay un momento es éste. No me hubiera atrevido nunca a traer esta obra a España de no contar con el momento propicio que estoy viviendo aquí. No me canso de decir que venimos animados por la calidez y la familiaridad con la que me he sentido tratado”, confesó el intérprete, que contó rápidamente con el apoyo de sus dos colegas para esta “locura artística” de plantarse en Madrid.
Tras los últimos éxitos del cine argentino en España, parece que le toca el turno al teatro. Con Art, Ricardo Darín y sus colegas inauguran un año en que la escena argentina copará gran parte de los estrenos teatrales en España, algo que ocurría hace años pero a la inversa, con intérpretes españoles en los escenarios porteños. “Esto no hace sino reforzar la vinculación que existen entre nuestros países, nuestras culturas y nuestra gente, que es mucho más férrea de lo que pensamos”, explicó Darín, mientras, a su lado, Oscar Martínez aseguraba: “Uno se siente como en casa. Yo, que me crié mamando la nostalgia de mis abuelos por España, el otro día fui a ver Los lunes al sol y me pareció maravillosa. Es una película que puede ser vista con la misma emoción aquí o en Argentina”. Darín volvió a tomar la palabra: “Cuanto más simple y acotada a los seres humanos es una historia más nos acerca y nos vincula. Son historias que calientan el corazón y abren la cabeza”.
Darín está convencido de que Art se convertirá en un clásico. “Como el buen libro o el buen cine o la buena música, esta obra nos ha mejoradocomo personas. Art plantea el estrecho vínculo de tres amigos, pero la historia se puede extender a las relaciones familiares o conyugales. Art habla de tolerancia e intolerancia, de amor, de amistad y estos son temas que no van a perder vigencia jamás”, dijo el actor.
Los tres intérpretes hablan de la obra como de una partitura musical. “Es una tragicomedia, donde hay momentos para solistas, para el duo o el trío, momentos piano, forte y crescendo, todo sostenido a ritmo metrónomo”, explicó Palacios en términos musicales. Después de tantas representaciones, a los actores todavía les quedan ganas de más. “Es posible una interpretación profunda cada día. Lo divertido y enérgico es tratar de encontrarlo. La comodidad se lleva mal con la creación. Son la exigencia y el riesgo lo que nos mantiene vivos”, dijo Darín.
Esta pieza teatral, de la que el productor Pablo Larguia ha conseguido los derechos de representación en exclusiva en España para los próximos tres meses, fue estrenada en Madrid por Flotats en septiembre de 1998, junto a José María Pou y Carlos Hipólito. La obra, que gozó de gran éxito de crítica y público, estuvo en la escena española durante más de dos años. Ahora, Flotats quiere recuperarla con tres actores de una generación más joven: Javier Cámara, Ernesto Alterio y Juan Diego Botto. Por ahora, no ha sido posible, dados los compromisos cinematográficos de Alterio y Botto, por lo que no hay fecha prevista. A partir de abril, cuando se termine la exclusividad de los derechos de la versión argentina, Flotats podría montarla de nuevo. La autora de la obra, Yasmina Reza, gran amiga de Flotats, consultó al actor español la posibilidad de que Ricardo Darín estrenara en Madrid su versión teatral. “Por supuesto le dije que no tenía ningún problema. Quién soy yo para prohibir nada. Tengo la intención de hacerlo de nuevo pero no enseguida”, asegura Flotats.