El poder adquisitivo de los argentinos cambió cualitativamente a partir de la crisis de fines de 2001. Sin embargo, las sociedades privadas de conciertos continuaron durante 2002 con sus actividades previstas y, para este año, anunciaron temporadas que, aunque algo más pobres que las de otras épocas, ofrecen grandes atractivos. El Mozarteum Argentino, Festivales Musicales y Nuova Harmonia (el ciclo de música que organiza en Buenos Aires el gobierno italiano) presentan, en general, menos orquestas y menos nombres rutilantes que los de apenas dos años atrás. Hoy sería imposible una visita como la de la Filarmónica de Berlín (acto casi póstumo de la virtualmente desaparecida y endeudadísima Asociación Wagneriana). Pero, aun así, se dan el lujo de contar con algunos de los principales intérpretes del momento.
El Mozarteum comenzará sus actividades en mayo, con la presencia de un peso pesado: la Orquesta de Filadelfia con la dirección de Wolfgang Sawallisch. El organismo actuará en dos conciertos, el 23 y el 24, haciendo la Sinfonía Nº 3 de Schumann y la Nº 2 de Brahms en el primero y, en el segundo, la Sexta de Beethoven, Don Juan de Richard Strauss y la Obertura de Tannhäuser de Wagner. El 28 y 29 de ese mismo mes se presentará uno de los grupos historicistas que visitará Buenos Aires en 2003. El Combattimento Consort de Amsterdam, dirigido por Jan Willem De Vriend y con Jacques Zoon como solista de flauta hará obras de Telemann, Vivaldi, Tarquinio Merula, Biagio Marini y Johann Friedrich Fasch, trazando un panorama del barroco desde sus comienzos en el 1600 hasta el estilo galante y el preclasicismo. Otro holandés, el notable cellista Pieter Wispelwey (que ya estuvo en la Argentina en dos oportunidades, haciendo las Suites de Bach y la integral de las Sonatas para cello y piano de Beethoven), actuará el 24 y 25 de junio junto al pianista Dejan Lazic (aún no anunció el programa) mientras que el excelente Cuarteto Alban Berg hará el Cuarteto Emperador de Haydn, el Cuarteto “Sonata Kreutzer” de Leos Janacek y el Op. 95 de Beethoven (el 3 de julio) y el Cuarteto K. 428 de Mozart, el Nº 4 de Alfred Schnittke y el Cuarteto “Aus meinem Leben” de Bedrich Smetana (el 4 de ese mes).
En agosto –los días 12 y 13– actuará la Filarmónica Joven de Alemania, con la conducción de Lothar Zagrosek y la actuación solista de la soprano Claudia Barainsky, con un programa que incluye arias y canciones de Richard Strauss. La sorpresa estará en la ejecución de las Seis Piezas Orquestales Op. 4 del filósofo y músico Theodor Adorno. El 19 y el 20 de ese mes la orquesta volverá a actuar pero junto al Coro Bach de Mainz, con dirección de Ralf Otto, haciendo dos de las obras cumbres del repertorio: la Misa en Si Menor de Bach y la Missa Solemnis de Beethoven. El 11 y 12 de septiembre será el turno de una de las grandes orquestas del momento con uno de los mejores directores de la actualidad: la Budapest Festival Orchestra junto al húngaro Ivan Fischer. El programa, sumamente interesante, incluye en el primer concierto Juego de Cartas de Stravinsky, Suite de Danzas de Béla Bartók y la Sinfonía Nº 9 de Schubert y, en el segundo, La Creación del Mundo de Darius Milhaud (una composición con influencias jazzísticas), Minutos Sinfónicos de Dohnanyi y la Sinfonía Nº 4 de Beethoven. Y el 18 y 19 de ese mes se presentará un gran pianista, Leiv Ove Andsnes, haciendo las Romanzas Op. 28 y el Carnaval en Viena de Schumann y la genial Sonata D. 960 de Schubert. Las últimas funciones del año serán 2 y el 3 de octubre y contarán con la actuación del violinista Uto Ughi –un viejo conocido del Mozarteum– y el pianista Alessandro Specchi.
Dentro del ciclo de Festivales Musicales la gran atracción, sin duda, es Musica Antiqua Köln, un grupo que ya había actuado para esta sociedad de conciertos cuando todavía estaba lejos de convertirse en una verdadera estrella de la interpretación de música barroca. Dirigido por el violinista Renhard Goebel, este conjunto es uno de los mejores en su tipo y sus interpretaciones de obras como los Brandeburgueses de Bach son unareferencia inevitable en la materia. Esta vez harán su versión para conjunto de El Arte de la Fuga de Bach. Otra visita relevante será la de la pianista Zhu Xiao-Miei, que deslumbró el año pasado con las Variaciones Goldberg de Bach y en esta ocasión interpretará algunas de las maravillosas sonatas para teclado escritas por el napolitano Domenico Scarlatti. También actuarán dentro del ciclo la Camerata Bariloche y el coro Grupo de Canto Coral, la Orquesta de Cámara del Kremlin, la Orquesta de Cámara de Toulouse y el Trío Guarneri de Praga. Para Nuova Harmonia, por su parte, actuarán el excelente violinista Giuliano Carmignola y dos muy buenos grupos historicistas: el Ensemble Aurora, que conduce el magnífico violinista Enrico Gatti y la Accademia Bizantina, conducida por el clavecinista Ottavio Dantone.