Cirilo Donaire tiene un grave problema: nadie pronuncia su apellido como se debe. En la búsqueda de la aceptación de su nombre, el marginado Donaire (Rubén Fleitas) es incentivado por la radio para ser escritor. Decide presentarse ante un profesor pero es bruscamente rechazado, aunque le recomiendan que se dedique a algún instrumento. Entonces intenta probarse como guitarrista en un grupo de música, pero el maestro le dice que se dedique a otra cosa. Después prueba con ser boxeador: también le pedirán que se retire. Cambia de rubro con soltura, pero sus profesores le dicen siempre que haga otra cosa. Donaire busca “empleos y oficios” pero sólo recibe una palmadita en la espalda, de las que duelen en el alma. Sin empleos ni oficios, Donaire no es nadie. Ni siquiera saben decir su nombre. Esa es la trama de La saga de Cirilo Donaire, que el cineasta jujeño Miguel Pereira, director de La deuda interna y coordinador del Festival de Cine de Mar del Plata, llevará al ciclo Ensayos, que emite Canal 7, hoy a las 22, coproducido por el Incaa.
La historia de La saga... es una adaptación del cuento Empleos y oficios, de Alberto Alabí, amigo de la infancia de Pereira. “La historia plantea la búsqueda de una identidad. Cirilo Donaire la busca a través del arte, de la literatura, de la música, del boxeo, como para satisfacer un deseo interno y encontrar un lugar de reconocimiento en la sociedad”, cuenta Pereira a Página/12. El telefilm es una comedia tragicómica, hiperrealista, de tinte grotesco, realizada en blanco y negro. “Cuando me ofrecieron hacer un capítulo, como se trataba de poco tiempo, quise hacer un cuento. Como no tenía nada escrito pensé en Alabí, quien ahora es profesor de literatura y vicerrector del Colegio Nacional donde fuimos juntos.” La historia está basada en una historia “de dos páginas”. “Mezclamos lo literario con el lenguaje de cine. Por eso quisimos plantear una situación dentro de un programa de radio, para meter sus textos.” Alabí trabajó con Pereira el guión a través de Internet y compuso gran parte de la música. “El armaba el texto, yo lo guionaba y se lo mandaba de vuelta por mail”, cuenta Pereira.
Detrás de la historia individual de Cirilo Donaire hay, además, un problema social. “Es una historia de marginalidad, interna y social. El blanco y negro le da un tono de comedia antigua y anacrónica. Puede suceder hoy, pero también en los ‘50.” Pereira sigue pensando en Jujuy cada vez que puede hacer algo. El telefilm fue rodado íntegramente en esa provincia, su elenco es de actores jujeños o residentes en Jujuy. Entre ellos están Sergio Etcheverry, Zacarías Pérez, Patricia Lubel, Adán Cesarini, Pablo Mercado, Juan José Yazlle, Andrés Rivarola, María del Carmen Echenique, Carla Cuevas y Juan Carlos Ocampo. “Allá hay gente muy talentosa, una movida teatral grande. Y ya que uno tiene una inserción nacional, aprovecho para darles un espacio, para que puedan mostrar lo que hacen.” Así hizo con uno de sus últimos documentales sobre Rosario Quispe y así hará pronto en la próxima película que va a realizar, llamada El hombre que llegó a un pueblo del escritor Héctor Tizón, otro jujeño.
La historia personal de Cirilo Donaire (“Donaire se escribe todo junto”, aclara), es un cuento de algún modo conocido. Tanto en el norte argentino, como en una gran ciudad, donde los hombres buscan su lugar en el mundo. Al final, junto a otros personajes, Donaire luchará por el reconocimiento de su propia existencia.