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El Rey de la Selva sigue reinventando la historia
La señal Disney Channel estrena hoy “La leyenda de Tarzán”, una nueva versión animada de la clásica novela de aventuras. Después de haber sido protagonista de 76 películas y docenas de series, el célebre personaje continúa deleitando a grandes y chicos.
› Por Emanuel Respighi
Cuando en 1912, el escritor Edgar Rice Burroughs comenzó a escribir y publicar en una revista semanal, los primeros capítulos de la historia de un bebé criado en medio de la jungla por un gorila, probablemente no imaginaba la magnitud del éxito que años más tarde alcanzaría la versión completa de aquellos episodios. Tarzán de los monos se convirtió en una de las obras literarias que más adaptaciones tuvo en la historia cinematográfica y televisiva. A casi 90 años de su primera aparición pública, el legendario cuento centrado en “el rey de la selva” vuelve a la pantalla chica. Con el nombre “La leyenda de Tarzán”, la señal Disney Channel estrena hoy (irá de lunes a viernes a las 11.30, con repeticiones los sábados y domingos en el mismo horario) una nueva versión animada de la histórica novela de Burroughs.
Es, en rigor, uno de los estrenos más promocionados del canal que pertenece a la empresa del viejo Walt. En principio, no parecería novedoso. La serie animada se suma a las más de 76 películas, 26 libros “oficiales”, docenas de series de TV y miles de revistas que la historia de Tarzán disparó por el mundo desde su nacimiento. El desarrollo de “La leyenda de Tarzán” sigue en buena medida a la historia original: una joven pareja inglesa muere tras un naufragio frente a las costas africanas y deja a la buena de Dios a su pequeño hijo, quien termina adaptándose a la vida en la selva gracias a la crianza de una familia de monos.
Pero la serie que hoy verá la luz en toda Latinoamérica no comienza contando la historia por todos conocida, sino que arranca a partir del final de la película Tarzán, que Disney estrenó en la Argentina en 1999. De esta manera, el programa infantil suprime la primera parte del relato de Burroughs, desarrollando su guión en la supuesta vida que Tarzán y su enamorada, Jane, habrían llevado en medio de la jungla.
Carrera contra el tiempo es el nombre del capítulo que abrirá “La leyenda de Tarzán”. El poderoso Rey de la Selva se ve afectado por la mordedura de una insignificante araña, cuyo veneno mortal amenaza con matar al rey de los animales. Enterado de la noticia, un grupo de animales acompaña a Jane y al debilitado Tarzán a buscar la raíz de una flor que oficiaría de antídoto. Pero el tiempo apremia y la flor no aparece...
La calidad visual y la gracia con que se desarrolla el guión son dos de los principales “ganchos” del ciclo, pensado preferentemente para un target de público que va de los cuatro a los diez años de edad. Si bien el conflicto central de la obra de Burroughs –la lucha entre el mundo civilizado y el mundo de la jungla– está presente en “La leyenda de Tarzán”, su idea primordial es entretener a los niños-espectadores mediante la acción y el humor (centrado en los comentarios del ingenuo elefante Tantor y Terk, quien hace las veces de la mona Chita de la versión original). El choque entre lo civilizado y lo salvaje se ve matizado, ya que no pasa de las bromas que intercambia Jane con los demás animales de la selva. Los chicos se tienen que divertir. Y esa expectativa se cumple absolutamente. Por eso Terk, el más reacio a aceptar a Jane, finaliza el capítulo afirmando: “Jane es valiente. Pero se balancea por las lianas como un chimpancé recién nacido y tiene las rodillas huesudas”.