ESPECTáCULOS
Pauls también persigue a los terroristas nucleares
La TV por cable emite dos películas estadounidenses que el actor rodó gracias al éxito de Nueve reinas. “Yo trabajo en lo que me interesa, antes de trabajar a desgano pongo un kiosco”, dice.
› Por Emanuel Respighi
La industria cinematográfica nacional atraviesa desde hace un par de años una de sus etapas creativas más fértiles. Más allá de la calidad dispar que se puede observar en las numerosas producciones argentinas que vieron la luz en el último tiempo, lo cierto es que el cine local generó un desarrollo estético y artístico que le bastó para sortear los obstáculos a los que lo expuso la crisis económica argentina, abriéndose fronteras afuera con inusual interés. En ese marco, Gastón Pauls fue –junto a Ricardo Darín, claro– uno de los actores nacionales que más rédito sacó del boom, a partir del éxito de Nueve reinas, el film dirigido por Fabián Bielinsky en el que los actores comparten cartel. Entre las numerosas ofertas que, inmediatamente después de estrenado el film, Pauls recibió desde el exterior, el actor participó en Anticuerpos y 747: robo en las alturas, películas realizadas por la productora estadounidense UFO que no llegaron a estrenarse comercialmente en el país y de las que poco se sabe. Sin embargo, ambos trabajos inéditos en el país del actor argentino se pueden ver por estos días a través de la pantalla de Cinecanal.
Cuando a principios del 2001 el productor argentino Sergio Sesa lo tentó para rodar un par de películas en el exterior, Pauls dudó un poco en aceptar la oferta. No por las propuestas en sí, que le parecían interesantes desde lo actoral. La duda recaía en hacer un trabajo de calidad. “Sabía que uno de los productores estadounidenses –explica Pauls a Página/12– había visto Nueve reinas y le había gustado mi trabajo. Entonces me convocaron para actuar. Las películas forman parte de una segunda línea del cine norteamericano, de mediano presupuesto, que por lo general son de ciencia ficción y acción. Lo que me terminó de convencer fue justamente los géneros, que no los había trabajado. Sólo había hecho ciencia ficción en La sonámbula, pero no con el nivel de efectos especiales que se pueden ver en estas películas.”
Anticuerpos (2001) es una película de ciencia ficción que Pauls rodó en Sofía, Bulgaria, junto a Lance Henriksen (Allien, Millenium) y Robin Givens (ex esposa de Mike Tyson), bajo la dirección de Christian McIntire. El film cuenta la historia de un terrorista que amenaza a toda Europa con accionar un dispositivo que lleva consigo, capaz de detonar una bomba nuclear de impredecibles consecuencias. Un equipo de expertos en armas y científicos –entre los que se encuentra el actor argentino– es reunido especialmente con la misión de localizar al terrorista y abortar su plan. La película se puede ver el viernes 30 de enero a la medianoche, y el 19 de febrero a la 0.30.
Por su parte, 747: robo en las alturas (Rapid exchange) es un film que Pauls rodó en Los Angeles, en 2002, bajo la dirección de Tripp Reed y en compañía de Lorenzo Lamas. Allí, Pauls interpreta a uno de los delincuentes de una banda que se dispone a robar en pleno vuelo a un avión que transporta millones de dólares. Pese a los inconvenientes lógicos que presenta asaltar un avión a más de 10 mil metros de altura, el peor obstáculo que deberán sortear los ladrones es el recelo y la desconfianza que tiene cada uno de ellos con los otros. Un cuadro de perversas relaciones que pone en peligro la operación. 747... se emitirá el 1º de febrero a las 4.35, el 10 a las 2.40 y el 18 a la 0.40, siempre por la pantalla de Cinecanal.
Si bien las películas tienen un mediano presupuesto, el actor –que en abril volverá a la TV con la segunda temporada de Ser Urbano– señala que cada una de las producciones demandó una inversión cercana a los 10 millones de dólares. “Es una cifra que en el país alcanzaría para rodar al menos 30 películas de primer nivel”, remarca el actor y conductor televisivo. “Pero más allá del dinero, acepté la propuesta porque me parecían trabajos serios y divertidos a la vez. Hay ciertos films supuestamente serios, de denuncia y compromiso, que cuando uno mira quién los produce se da cuenta de que de serio no tienen nada. Yo me juego por las películas que me interesan, las que no rechazo.No hago cualquier laburo. Antes de hacer algo a desgano prefiero poner un kiosquito y vivir de eso toda mi vida.”