ESPECTáCULOS
El tesoro de The Beatles cabe en una sola valija
Un turista inglés compró en un mercado de pulgas australiano una valija que habría pertenecido a Mal Evans, mano derecha del grupo. El hallazgo incluye supuestas cintas inéditas de los Fab Four.
Por W. Oppenheimer*
Desde Londres
Aunque los expertos aún no han dicho la última palabra, un turista inglés afirma haber encontrado en un mercado de pulgas de Australia el tesoro perdido de Los Beatles: una valija con más de 400 fotografías, documentos, discos de vinilo y, sobre todo, cintas magnetofónicas con cuatro horas y media de música quizás inédita del legendario cuarteto de Liverpool. De ser verdad lo que dice, Fraser Claughton, de 41 años, un vendedor de seguros de automóvil de Tankerton, en Kent, el sudeste de Londres, habría comprado por 50 dólares australianos (30 euros) un tesoro valorado quizás en cientos de miles.
Claughton estaba hace un mes en un mercado de Lara, un suburbio al norte de Melbourne, buscando una valija donde poner el equipaje extra acumulado durante sus vacaciones. Se fijó en una maleta llena de recuerdos de Los Beatles y, picado por la curiosidad, se la quedó. “Me pareció interesante”, explicó a The Times. Claughton y John Read, un editor de libros infantiles que intenta poner en orden los documentos, sostienen que pertenecían a Mal Evans, un fanático de Los Beatles desde que los vio por primera vez en el Cavern Club de Liverpool en 1962. Evans se hizo muy amigo de ellos y terminó como guardaespaldas y empleado todo terreno, siguiéndolos a todas partes y teniendo a ellos un acceso privilegiado.
Durante años, Evans fue acumulando recuerdos, pequeños tesoros que se llevó consigo cuando se instaló en California a mediados de los ’70, cuando el grupo estaba ya separado. Dice el mito que Mal Evans los conservaba para escribir una historia de Los Beatles que, finalmente, no tuvo tiempo de escribir: murió en 1976, abatido a tiros por la policía de Los Angeles, que confundió un arma de juguete con un arma real tras una discusión con su novia.
Cómo pudo llegar esa valija a Australia es un misterio. Aunque Claughton y Read afirman que Evans viajó allí como ingeniero de sonido, los expertos creen que sólo estuvo una vez, en 1964, durante una gira de Los Beatles, cuando aún no existían muchos de los documentos encontrados ahora. Hay fotos de Linda McCartney cuando acababa de dar a luz a Stella, y de Los Beatles fumando marihuana. Y hay, sobre todo, varias cintas con la etiqueta “Abbey Road. No para poner en circulación”, con versiones de canciones como We Can Work It Out y Cry Baby Cry y una canción hasta ahora nunca divulgada, I’m in Love. La colección incluye grabaciones de Paul McCartney y John Lennon hablando e improvisando sobre versiones antiguas, en acústico y con guitarra eléctrica, así como versiones piratas.
Los expertos son muy cautos sobre la autenticidad del hallazgo. Mark Lewisohn, de Apple, la discográfica de Los Beatles, prefirió no pronunciarse sobre la autenticidad de los cortes hasta poder estudiarlos en profundidad. Glenn Baker, un australiano especialista en la historia del rock, es muy escéptico pero admite que, “si se trata del archivo de Mal Evans, es un hallazgo comparable al Santo Grial, porque Evans tuvo un acceso a Los Beatles ilimitado, incomparable y sin precedentes”.
Sin embargo, expertos en derechos de autor consideran que la propiedad intelectual de esa música seguiría siendo de Los Beatles, y no del turista inglés que encontró las cintas. En 1996, Paul McCartney llevó a los tribunales a la viuda de Evans, Lily, cuando intentaba subastar una serie de recuerdos del grupo, entre ellos el original de la letra de With A Little Help From My Friends. Pero otros recuerdos se subastaron sin mayores problemas. En 1998, un libro de notas de Evans con borradores de Hey Jude y de Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band se subastó en Londres por el equivalente de 150.000 euros. Una grabación de una aparición de John Lennon en una emisora de EE.UU. recaudó 59.750 dólares el mes pasado en Christie’s de Nueva York y una grabación de 20 minutos con distintas versiones de She Said She Said recaudó casi 60.000 libras (90.000 euros) hace dos años. “Excepto un par de canciones, suena muy emocionante y seguro que tiene relación con Mal Evans”, indicó Peter Doggett, asesor de recuerdos de pop de la casa de subastas londinense Christie’s, que –claro– se mostró interesado por el hallazgo.
*De El País de Madrid. Especial para Página/12.