ESPECTáCULOS
› ENTREVISTA CON JAMIE LYNN DISCALA
“Yo soy Meadow, o sea, la oveja negra de la familia”
Por E. R.
Junto a Tony Soprano conviven una variada serie de personajes de distintas personalidades y costumbres, entre los miembros de su familia adoptiva (la mafiosa) y la de sangre. A los primeros los puede domesticar a través de la violencia, método que no puede utilizar para los que pertenecen al segundo grupo. A la reciente separación de su mujer, Tony le agrega la labor que le dan sus dos hijos adolescentes, Meadow y Anthony Jr. Con algunas diferencias, todos en su entorno aman sentirse parte de la familia Soprano.
La única excepción al contexto de halagos permanentes es Meadow, la hija de Tony a la que poco y nada le interesa saber acerca del “negocio”. Ni tampoco intenta sacar provecho de esa condición, a la que aborrece como ningún otro personaje de la serie. Página/12 dialogó de manera exclusiva con Jamie Lynn Discala, la actriz de 23 años que interpreta a Meadow, el eslabón endeble de Tony Soprano. “Soy la oveja negra de la familia”, dice.
–¿Qué puede esperar el público latinoamericano de esta temporada?
–La temporada pasada terminó con la separación de Tony y Carmela. Y esta temporada arranca con lo que ocurre a raíz de esa separación. Se irá profundizando en cada personaje y cómo cada uno de ellos lidia con esta separación. La serie va a poner foco en cómo se desarrolla la relación de Tony y Carmela, cómo se ubica el resto de los personajes frente a la ruptura matrimonial y cómo incide la ruptura en la familia.
–Y su personaje, Meadow, ¿cómo se acomoda ante esta nueva situación familiar?
–Bueno, Meadow sigue estudiando y tratando de comprender su propia vida, que no es poco. Ella continúa saliendo con el mismo chico y pasa momentos tormentosos lidiando con sus padres y con la separación. Aunque ya vive sola, seguirá yendo a la casa de su madre a lavar la ropa, en una rutina que le encanta y mediante la cual se conecta a la familia. Vivirá situaciones propias de padres que se separan. Sin embargo, Meadow no se pone del lado de Tony ni del de Carmela: no favorece a uno más que al otro. Entiende que hubieron problemas y que los problemas determinaron la separación.
–Con Tony fuera de la casa, ¿cambiará la relación tirante existente entre padre e hija?
–La relación con Tony seguirá por los mismos carriles. Pero a medida que Meadow va creciendo la relación entre ellos mejora. Pero no al punto de llegar a la que Tony tiene con AJ, su niño mimado.
–¿Cuál es el principal núcleo conflictivo de esta nueva temporada?
–Esta temporada se centrará mucho más en la mafia que en la familia. Por el contrario, el año pasado el conflicto estuvo mucho más centrado en los problemas familiares de los Soprano. Ahora, el protagonista es el “negocio”... Y como Meadow no tiene ninguna relación con la mafia, salvo por ser la hija de Tony, esta temporada no se involucrará tanto como en la pasada. En cambio, si bien su hermano tampoco está ligado al negocio familiar, él sí intentará sacar provecho del poder y del status que tiene.
–Los críticos señalan que la quinta temporada es la mejor del programa. ¿Está de acuerdo?
–Todas las temporadas fueron diferentes. No puedo comparar ésta con ninguna otra, pero sí puedo decirte que es muuuuuuy buena...
–¿Cómo se prepara para la que se dice será la última temporada del ciclo?
–Mientras espero el gran regreso, disfruto de mis vacaciones sin ninguna ansiedad especial. A comienzos del 2005 volveremos a trabajar al set como si nada. Aunque hasta donde yo sé, la sexta temporada es la última. Ser parte de Los Soprano es una experiencia increíble y hermosa. Me siento feliz del papel que hago y por trabajar con los maravillosos guionistas que escriben la serie y con los excelentes actores miembros del elenco. A los 23 años, más no puedo pedir.