De un lado está el científico brillante pero perdido en sus sueños. Del otro, un empresario exitoso pero cegado por su ambición. Entre ambos, una hermosa y joven científica, novia del científico en sus épocas de estudiantes, pero ahora vinculada al empresario. En el medio, el corpulento socio y amigo del científico y el licencioso hermano de la científica. Y, cargando contra ellos cinco, reunidos en una estación espacial, una tormenta radiactiva que emana desde el sol. Así es como comienza la historia de Los 4 fantásticos, cuya exposición accidental a esa radiación solar los convertirá paulatinamente en el Hombre Elástico, La Mole, la Chica Invisible y el Hombre Antorcha, y esa paulatina conversión ocupará la primera mitad de la película. La segunda mitad, como no podía ser de otra manera, estará dedicada a la lucha contra el quinto expuesto a la radiación, ese empresario que se quedará sin su imperio, sin la chica y sin ser fantástico, y se convertirá en el peligroso supervillano Dr. Doom.
A pesar de ser una de las joyas de la corona del imperio Marvel, piedra fundacional junto a El Hombre Araña de la revolución generacional del comic estadounidense en los agitados años sesenta, Los 4 fantásticos parecen haber llegado tarde al reparto. Y entonces su adaptación al cine apenas si califica como un producto menor de esta reciente fiebre de los grandes estudios por tener su propia franquicia en el mundo del comic. Es cierto que una década atrás se llegó a terminar una película que adaptaba su historia, pero el producto final fue tan malo que jamás se llegó a estrenar. Y, desde entonces, y a la luz del éxito de sus compañeros de editorial en la pantalla grande, se estuvo trabajando en una nueva adaptación, por la que pasaron más de un nombre y más de un guión. El que finalmente llegó a la meta lleva la firma de Mark Frost y Michael France, responsables de Twin Peaks y Hulk, respectivamente. Y su director es apenas un eficaz empleado de Hollywood, capaz de ponerle la firma a la olvidable remake estadounidense de aquel film de Luc Besson titulado Taxi.
Lejos de esa sensación de superproducción e importancia que arrastran detrás de sí películas como El Hombre Araña y X-Men, e incluso el flamante Batman, Los 4 fantásticos recuerda mucho más a un capítulo doble de una serie de televisión. Película Clase B dentro de los más recientes ejemplos de superhéroes llevados al cine, la película de Tim Story tal vez de alguna manera se acerque a lo que fue aquel original comic de Stan Lee y Jack Kirby, una historia de superhéroes que privilegia sus dudas y peleas entre sí antes que su rostro más heroico. Claro que lo que entonces humanizaba al género hoy lo banaliza, ya que su referente son los diálogos “humanos” de las series de televisión o las telenovelas. Con mucha mejor suerte a la hora de presentar los superpoderes de cada uno de sus protagonistas, e incluso las supertentaciones a las que se verían sometidos en el mundo actual, Los 4 fantásticos es una película decididamente adolescente, principalmente a la hora de presentar sus conflictos sentimentales. Su mayor capital son actores como Chris Evans yMichael Chiklis, el primero encarnando la banalidad y el exhibicionismo infantil de La Antorcha Humana. Y el segundo interpretando con suma humanidad a La Mole, incluso desde debajo de un contundente maquillaje.


5-LOS 4 FANTASTICOS
Fantastic Four EE.UU. 2005
Dirección: Tim Story.
Guión: Michael France y Mark Frost, basado en personajes de Jack Kirby y Stan Lee.
Fotografía: Oliver Wood.
Edición: William Hoy.
Música: John Ottman.
Intérpretes: Ioan Gruffudd, Jessica Alba, Chris Evans, Michael Chiklis, Julian McMahon, Hamish Linklater, Kerry Washington, Laurie Holden, David Parker, Kevin McNulty, María Menounos, Andrew Airlie y otros