La segunda edición del programa “La escuela al cine”, un proyecto de la Secretaría de Educación del Gobierno de la Ciudad, comenzó a funcionar ayer, con la proyección del film francés Las marginales, de Serge Meynard, en el complejo de salas del Abasto. Los beneficiados fueron ayer 350 estudiantes de los dos últimos años pertenecientes a los cinco colegios públicos secundarios con orientación en Comunicación que existen en Buenos Aires. A lo largo de esta semana los alumnos de las escuelas Julio Cortázar (Flores), Claudia María Falcone (Palermo), Rumania (Villa Devoto), Tomás Espora (Floresta) y de la EMEM Nº 3 (Villa Lugano) serán privilegiados y exclusivos espectadores de la “Primera Semana de Cine Europeo para Jóvenes” cuyo objetivo es vincular la escuela con los medios y abrirla a nuevos lenguajes. Junto a la Secretaría de Educación porteña participan en la organización del evento la cadena Hoyts General Cinema y las embajadas de Francia, Alemania, Italia, Inglaterra y España cuyos agregados culturales fueron los encargados de seleccionar producciones cinematográficas que abordarán temáticas adolescentes.
“La propuesta tiene varios objetivos” reconoció el secretario de Educación, Daniel Filmus, respecto del proyecto destinado a los estudiantes de Comunicación. “La idea es ponerlos en contacto periódicamente con un lenguaje distinto, que no sea el del pizarrón y la tiza sino, en este caso, con el lenguaje cinematográfico. El segundo es ponerlos en contacto con otras culturas. Por eso, estamos tomando películas que son inéditas o fueron poco vistas en el circuito comercial, de manera que puedan acceder a material valioso y que después puedan trabajarlo con los profesores en forma de crítica o de análisis en cada una de las divisiones”, explicó el funcionario.
Las películas seleccionadas –además de Las marginales que se vio ayer– son la alemana Alaska.de de Esther Gronenborn, la española Alas de mariposa de Juanma Bajo Ulloa, la italiana Prefiero el rumor del mar de Mimmo Calopestri y la inglesa Billy Elliot de Stephen Daldry. Luego de dejar el rol de espectadores, los estudiantes deberán calzarse el traje de su futura profesión para presentar una crítica cinematográfica de alguno de los cinco films. Para esa tarea le serán de suma utilidad las opiniones de personalidades vinculadas al mundo del cine que los visitarán cada día: los realizadores Eliseo Subiela (El lado oscuro del corazón, No te mueras sin decirme a dónde vas) y Bruno Stagnaro (Pizza, birra, faso), el guionista Fernando Castets (El hijo de la novia) y Ricardo Manetti, docente de la Universidad del Cine y de la Carrera Diseño e Imagen de Sonido de la UBA.
Ayer fue el turno de Graciela Maglie, guionista en cine de La fuga y en televisión de “Nueve lunas” y “De poetas y locos” quien, luego de ver Las marginales junto a los estudiantes, charló con ellos durante media hora, respondió dudas y escuchó opiniones y planteos. Finalmente dejó un consejo para el armado de las críticas: “Desde el punto de vista de la estructura narrativa deben tener en cuenta los perfiles de los personajes, si están diseñados para encarnar la historia que se ve, si son adecuados y verosímiles para representarla. Otras cuestiones son la distancia y proximidad de la emoción y si la película tiene un planteo, un desarrollo, un clímax y un final o una resolución. También es importante observar si los personajes vivieron un cambio o permanecieron iguales a lo largo de todo el film”, señaló ante la platea adolescente.
La primera versión del programa “La escuela al cine” se lanzó el año pasado y estuvo destinada a estudiantes de primer y segundo año de escuelas medias de la zona sur de la ciudad con el objetivo de acercarlos al cine. La experiencia se repitió a partir de abril de este año donde 4000 alumnos ya vieron Taxi, un encuentro, están viendo actualmente El hijo de la novia y verán en setiembre Herencia, aún no estrenada. Paralelamente se desarrolla esta segunda versión que, según sucoordinadora Roxana Morduchowicz, tiene “los mismos objetivos de acercar los chicos al lenguaje del cine pero en este caso se trata exclusivamente de cine europeo, de temática adolescente y exclusivo para alumnos de cuarto y quinto año de secundarios con orientación en Comunicación”.