Como muchos intelectuales de su generación, desde los ’70 Gioconda Belli integró las filas del Frente Sandinista de Liberación Nacional. También perseguida como muchos por la dictadura de Anastasio Somoza, se exilió en México y más tarde en Costa Rica. Fue miembro de la Comisión Político Diplomática del Frente Sandinista. En sus datos biográficos se menciona que fue correo clandestino, transportó armas, viajó por Europa y América latina obteniendo recursos y divulgando la lucha sandinista. En los ’80, tras el derrocamiento de la dictadura somocista, ocupó distintos cargos gubernamentales.
Tras varios libros de poesía publicados, en 1986 dejó todo cargo oficial para dedicarse a escribir su primera novela, La mujer habitada. Le siguió El país bajo mi piel (2001), escrita a modo de biografía, donde rescató sus años de militancia en la Revolución Sandinista. Allí Belli es capaz de enhebrar la memoria de un país y la suya propia, dejando testimonio de una rica historia vital. El pergamino de la seducción es su cuarta novela. Tras su publicación en español será editada en Alemania, Italia, Holanda y Estados Unidos.