SOCIEDAD › CONFIRMARON LA PRIMERA MUERTE POR CONTAGIO DE ESA ENFERMEDAD EN OBERá, MISIONES
Autoridades del Ministerio de Salud de Misiones y de la Nación confirmaron que la muerte de un trabajador tabacalero, ocurrida hace diez días, fue producida por contagio de fiebre amarilla.
El Ministerio de Salud Pública de Misiones confirmó ayer el primer caso fatal de fiebre amarilla –epidémica en Paraguay y Brasil– en la Argentina. Habían pasado 40 años sin que se registraran muertes por esa enfermedad en el país. Se trata de Lorenzo Rodríguez, un trabajador rural de 40 años que se dedicaba al cultivo de tabaco en San Vicente, un paraje selvático del centro de la provincia, que había muerto hace diez días. Mientras tanto, el ministro de Salud misionero, José Guccione, señaló que la hija de Rodríguez, una adolescente de 16 años, “también padece la enfermedad”, junto con otros tres casos. Hugo Fernández, director nacional de Prevención de Enfermedades de Riesgo, señaló a Página/12 que “ella evolucionó bien y ya no corre peligro su vida, aunque sigue internada en observación en el Hospital Samic”. Además, dijo que “hay cinco casos confirmados de fiebre amarilla en Misiones, todos relacionados con el área rural, el desmonte y el trabajo en chacras”.
El diagnóstico fue confirmado ayer por el Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas Julio Maiztegui, dependiente del Ministerio de Salud de la Nación, que analizó las muestras de sangre de la víctima. Así, quedó descartado el diagnóstico de leptospirosis que se dio a conocer cuando murió Rodríguez, dado que se trató de un “análisis inespecífico”, dijo Guccione. En principio, los estudios habían indicado que se trataba de una muerte causada por la leptospirosis, una enfermedad transmitida por ratas. Sin embargo, la víctima había estado internada en una clínica de la ciudad de Oberá con síntoma de la fiebre amarilla.
“En 1966 se habían registrado las últimas muertes por esa enfermedad en el país”, apuntó Fernández. La víctima, que no estaba inmunizada contra la fiebre amarilla, había permanecido internada tres días en un hospital de San Vicente, una zona señalada como “de riesgo”, puesto que allí murieron por fiebre amarilla varios monos carayá, comentó Fernández. En ese centro de salud, fue diagnosticado con gripe y regresó a su casa. Sin embargo, debido a la persistencia de los síntomas característicos de la fiebre amarilla, fue derivado a una clínica de la ciudad de Oberá. A ese establecimiento ingresó con un cuadro de “extrema gravedad” y falleció 24 horas más tarde, el 11 de marzo. “Tuvo una falla multisistémica que se complicó con la afectación de hígado y riñones que le terminó provocando la muerte”, explicó Fernández.
Además, el funcionario del Ministerio de Salud de la Nación apuntó que, con la muerte de Rodríguez, “suman cinco los casos confirmados sobre 199 analizados con síntomas asociados a la enfermedad”. Al respecto en la cartera de Salud de Misiones, Guccione precisó que esas personas circularon por zonas de riesgo en el área de San Vicente y Piñalito, donde aparecieron 17 monos muertos por fiebre amarilla y todas esas muertes estaban relacionadas con el ecosistema de la región, la tala de bosques en el interior, que desplaza a los grupos de monos hacia los bordes selváticos.
Además, Guccione puntualizó que “son nueve los casos estudiados, de los cuales cinco dieron positivo, tres fueron descartados y sólo queda uno en estudio, correspondiente a un joven internado en el Hospital Samic de la localidad de Eldorado”. Y adelantó que la hija de Rodríguez, Andrea, “seguramente será dada de alta esta semana por su buena evolución”.
La muerte del trabajador rural puso en alerta a las autoridades sanitarias de la provincia limítrofe con Brasil y Paraguay, donde ya se produjeron al menos 26 muertes. En el marco de las acciones de prevención, la cartera que dirige Graciela Ocaña informó que distribuyó 1.100.000 dosis de la vacuna en el país y entregó un refuerzo de 50 mil dosis en Misiones. La fiebre amarilla selvática comenzó a expandirse en Paraguay a mediados de febrero y, hasta hoy, hubo en ese país 24 casos confirmados con ocho muertos y diez sospechosos.
La fiebre amarilla es una enfermedad infecciosa aguda de origen viral, que se transmite a través de la picadura del mosquito Haemogogus y la causa el mismo microbio que produce la fiebre amarilla urbana, sólo que esta última es vehiculizada por el mosquito Aedes Aegypti, el mismo que transmite el dengue. Una de las principales acciones preventivas consiste en impedir la presencia del mosquito transmisor en las viviendas y su entorno, para lo cual se recomienda evitar tener recipientes que contengan agua estancada, dentro o fuera de la casa. En las últimos 20 años se registraron 3837 casos de fiebre amarilla selvática en Sudamérica, con 2229 muertos.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux