Después de fracasar con un intento de veto a la ley que limita la altura de las construcciones en sectores del barrio de Caballito, el gobierno de Mauricio Macri insistirá con la modificación, esta vez a través de un proyecto de ley. Tanta insistencia generó suspicacias entre los vecinos, que convocaron para esta noche a un acto público en la esquina de Rivadavia y Acoyte, y entre los diputados de la oposición, que rechazaron de plano la iniciativa.

El área de la discordia son seis de las 50 manzanas involucradas en la norma sancionada por la Legislatura: cuatro que rodean al Hospital Durand y otras dos ubicadas frente al Parque Centenario. Lo curioso de la controversia es que el Ejecutivo asegura que su proyecto no modifica los límites de altura que impuso la Legislatura, sino que apunta a “hacer una corrección para permitir el funcionamiento de comercios vinculados a la actividad hospitalaria, como farmacias o casas de ortopedia”, explicó a Páginai12 la vicejefa de Gobierno, Gabriela Michetti. Pero los legisladores aseguran que la ley que ellos votaron ya permite la habilitación de ese tipo de comercios. “Por eso no se puede entender por qué siguen insistiendo”, se preguntó la diputada Silvina Pedreira (Frente para la Victoria), presidenta de la Comisión de Planeamiento Urbano.

Después de dos años de reclamo, los vecinos de Caballito Norte consiguieron que la Legislatura apuebe la ley. Fue después de una doble lectura, que incluyó una audiencia pública. En el área involucrada no podrían construirse edificios de más de 13,50 metros, es decir, con un máximo de cuatro pisos. Pero en lugar de promulgar la ley, Macri decretó un veto parcial, que excluía a esas seis manzanas de los alcances de la ley. Una semana después, la Legislatura ratificó por unanimidad la ley que ya había votado: los propios legisladores del PRO, en masa, le dieron la espalda a la propuesta de su jefe.

Ahora, cuando el tema parecía cerrado, una nueva iniciativa volvió a ponerlo en el centro del debate. El anuncio lo hizo Michetti, la vicejefa, porque Mauricio Macri está en plena gira internacional. “Vamos a consensuar con los legisladores una modificación porque hay algunas cosas que la ley no permite, como la habilitación de fondos de comercio. Nuestra propuesta no tiene nada que ver con las alturas, no las modifica”, enfatizó la vicejefa.

Las organizaciones, que el jueves habían celebrado la ratificación de la ley, ayer lanzaron nuevamente su grito de guerra: organizaron un acto en la esquina de Rivadavia y Acoyte, para hoy a partir de las 19, para reclamar “la promulgación de la ley y la renuncia del subsecretario de Planeamiento Urbano, Héctor Lostri”, a quien consideran “el artífice del veto” y “la cabeza de un sector que favorece al negocio inmobiliario”, según la opinión de Mario Oybin, de la organización SOS Caballito, una de las convocantes a la protesta. El dirigente acusó a Lostri de “rehabilitar expedientes de permisos de obra que habían sido anulados por ilegales”. También participan de la convocatoria Protocomunas Caballito y Basta de Demoler, entre otras agrupaciones vecinales. Para Oybin, de SOS Caballito, el veto apuntaba a “demorar la promulgación de la ley y poder tramitar nuevos permisos de obra”.

Michetti consideró que “hay una intencionalidad política detrás de algunos grupos que organizan las protestas, que se están postulando para las elecciones de comunas”. “Es un disparate que digan que estamos a favor de las torres, el veto no tenía nada que ver con las alturas de edificios y este proyecto tampoco”, dijo la vicejefa a este diario.

La diputada kirchnerista Silvina Predreira, titular de la Comisión de Planeamiento, rechazó el proyecto “correctivo” del Ejecutivo. “No se entiende qué es lo que quieren”, dijo perpleja, tras aclarar que la ley sancionada “no restringe los usos comerciales”.

El proyecto que aprobó la Legislatura cambió en la zona del Durand la zonificación E3 (equipamiento) por R2B (residencial, pero con un uso amplio, que permite comercios). “Con el veto, la zonificación volvía a ser E3, con la cual, en un terreno de 900 metros cuadrados se podría construir un edificio en torre”, comentó la legisladora.