SOCIEDAD
› TRAS LA APARICION DE DIEGO LOBETO
Las dudas de un secuestro
La aparición de Diego Lobeto, el joven secuestrado durante diez días, convirtió el episodio en un caso más enigmático aún. Lejos de cerrar la investigación como un secuestro hiperprofesional –como se suponía hasta el momento–, ahora la policía ya considera la posibilidad de que se haya tratado de un autosecuestro.
Precisamente, el comisario Aníbal Degastaldi, jefe de la Delegación de Investigaciones de San Isidro, permaneció varias horas en la casa de Lobeto, donde habría estado interrogándolo. Los detalles de esa declaración, sin embargo, no trascendieron a la prensa. Es que los investigadores son cautelosos y la familia de Diego insistió en mostrarse reticente a la hora de revelar detalles sobre la experiencia que vivió el joven.
Pese a eso, allegados a la investigación insistieron en plantear dudas sobre el secuestro que vivió Lobeto, ya que desde el principio resultó confuso. Y, en tren de dudar, algunos especularon con la posibilidad de un autosecuestro o de un “ajuste de cuentas”, ya que la fachada de una de las concesionarias de Lobeto había sido baleada pocos días antes de que lo raptaran. La familia del joven rechazó esas versiones.