El gobierno de Santa Fe anunció que no adelantará la hora, como planea disponerlo el gobierno nacional para –si repite el decreto del año pasado– las provincias del sector oeste del país a partir del tercer domingo de octubre, en el marco del plan de ahorro de energía que lleva adelante desde 2007. Además, las autoridades de seis provincias del sector este anticiparon que no tienen intenciones de sumarse a ningún eventual cambio, aunque en ese caso es previsible que queden exceptuadas, como ocurrió en 2008. El argumento de los distritos que se oponen es que la extensión de la jornada diurna perjudica sus economías.

El gobernador santafesino, Hermes Binner, confirmó que “la provincia no se adherirá al cambio de hora como está previsto por el gobierno nacional para el domingo 18 de octubre”. “Hemos escuchado las quejas de la gente y decidimos llevar adelante esta idea, incluso ayer me comuniqué con el gobernador cordobés, Juan Schiaretti, y nos pusimos de acuerdo con esta medida”, indicó.

Sin embargo, Schiaretti dijo a la prensa que va a “esperar la reunión del Consejo Económico y Social (de hoy) para tomar la decisión, y espero que esa conclusión pueda ser coordinada con la hermana provincia de Santa Fe”. “El país no tiene tanta distancia de Este a Oeste como para que tengamos dos husos horarios diferentes”, acotó Schiaretti.

En tanto, los mandatarios de Buenos Aires, Entre Ríos, Capital Federal, Tucumán y Jujuy no definieron hasta ayer si adherirán a la norma nacional. Sectores empresarios vinculados con el comercio, la gastronomía y el entretenimiento plantean que el cambio horario perjudica sus actividades y afecta las temporadas turísticas.

El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, sostuvo ayer que en su gobierno estaban “viendo” qué hacer ante las quejas de algunas cámaras empresarias, intendencias de la Costa Atlántica y hoteleros que rechazan la medida. “Vamos a hacer una evaluación. Es un tema en que, dados los altos niveles de consumo y de demanda del sistema (de energía), se toman estas medidas para poder ampliar y amortiguar mejor el impacto sobre los picos de consumo”, acotó. Y argumentó que “no se puede tomar una decisión aislada especialmente en nuestra provincia que no coordine con la ciudad de Buenos Aires y otros distritos”.

Entre Ríos tampoco se pronunció hasta ayer y dejó el tema en manos de la Legislatura. San Luis, que tiene actualmente un horario diferente al resto del país, cambiará su hora este domingo, pero la compaginación horaria durará sólo una semana, dado que no volverá a modificar sus relojes hasta 2010.

Los gobiernos de Catamarca, Salta, Mendoza, Chubut, Neuquén y San Luis afirmaron que no se sumarán a la eventual decisión de incluirlos en el decreto nacional de la presidenta Cristina Fernández. De todos modos, esas provincias ya quedaron exceptuadas del cambio el año pasado.